- La soñada remontada de Xavi se ve ya imposible tras caer 0-1 en casa
El FC Barcelona se despidió este lunes de sus opciones de poder pelearle el título de LaLiga Santander 2021-2022 al Real Madrid tras caer en el Camp Nou por 0-1 ante un Cádiz que se le volvió a cruzar en su camino para arrebatarle puntos y coger aire en su carrera por la permanencia.
El equipo blaugrana se queda ya a 15 puntos del liderato, con 21 por jugar en su caso, pero lo peor de todo son las sensaciones que lleva ofreciendo en sus últimos partidos. Otra vez tuvo que ir a remolque ante un rival, que rotó y que se aferró a su peligro a la contra, su disciplina defensiva y al gran partido de su guardameta, Jeremías Ledesma, para salir del descenso. Cuatro partidos desde su regreso a Primera y ninguna derrota ante el conjunto catalán, una hoja de servicios al alcance de muy pocos.
El equipo de Xavi Hernández no se rindió y lo intentó por todos los medios, sobre todo tras el 0-1, pero esta vez no encontró goles salvadores y ahora su principal objetivo será defender la segunda plaza y el acceso a la Liga de Campeones, una pelea que ha avivado y que se jugará este jueves ante un rival directo como la Real Sociedad.
El Barça demostró que ha perdido la ‘chispa’ que tenía encendida no hace demasiado y que sólo fue capaz de encender Ousmane Dembélé. El conjunto blaugrana, en un ambiente en la grada del Camp Nou menos enrarecido de lo esperado tras lo sucedido ante el Eintracht, hizo algún retoque en el once, con Memphis como ‘9’ en lugar de Pierre-Emerick Aubameyang, pero le costó mucho hacer daño a un rival bien plantado y que apostó por reservar piezas como Negredo, Chust, San Emeterio, Idrissi o Akapo, más el sancionado Alcaraz.
El control del duelo fue de los locales, pero estos no encontraron facilidades hacia la portería de Ledesma. Sergio González acertó en su planteamiento y su equipo únicamente sufrió cuando agarraba la pelota un Dembélé que fue un tormento, aunque el extremo francés no encontró acompañamiento de sus compañeros, sobre todo por el otro lado con un poco protagonista Ferran Torres.
Dembélé fue el primero en avisar, casi al inicio, pero a partir de ahí, el equipo culé no sólo no pudo anotar el gol que le diese más tranquilidad sino que sufrió en los contragolpes cadistas, sobre todo el que lideró al filo de la media hora Rubén Sobrino que envió un ‘pase de la muerte’ a un Lucas Vázquez que desperdició la mejor ocasión del partido hasta ese momento cuando estaba solo ante Ter Stegen.
LEDESMA CONVIERTE EN ORO EL GOL DE LUCAS PÉREZ
El susto no espabiló demasiado a un FC Barcelona, aunque un aumento de la intensidad, liderado por su extremo, le permitió arrinconar al Cádiz en el tramo final en el que Ledesma tuvo más trabajo, principalmente con una gran mano a Dembélé que había realizado una gran cabalgada vertical tras una pérdida de Espino en el mediocampo.
El equipo de Xavi Hernández trató de meterle más ritmo al choque tras el paso por los vestuarios, pero se volvió a ver por cuarto partido consecutivo por detrás en el marcador por culpa de un nuevo despiste defensivo. Sobrino remató hasta en dos ocasiones a un metro de Ter Stegen, que repelió como pudo ambos, pero no el definitivo de Lucas Pérez.
El Barça intentó no acusar el golpe y se lanzó a por el empate, dependiendo siempre en exceso de lo que hiciese Dembélé, por lo que su técnico no tardó demasiado en meter en el campo a Aubamenyang por Memphis para buscar el rescate del ‘olfato’ del gabonés. El Cádiz trató de no perder el orden para mantener su valiosa renta, aunque se fue quedando sin salidas hacia el campo rival y se encomendó de nuevo a un Ledesma que le negó una vez más el gol al incansable extremo francés.
El Cádiz, pese a todo, volvió a perdonar una clara ocasión en una internada de Alejo, más intenso en el cruce que Lenglet, y otro pase que tampoco acertó a dirigir a la portería Alex Fernández. Sergio González metió piernas frescas para sujetar el arreón final local con la entrada de Luuk de Jong y Adama Traoré, últimas ‘balas’ de Xavi para la remontada.
El delantero neerlandés, jaleado por la grada, sólo tuvo una opción de ser salvador, con un cabezazo a la salida de un corner que se topó con el inconmensurable Ledesma, que también le denegó el gol del empate a Eric García y, sobre todo, a Aubameyang. El Cádiz también pudo sentenciar, pero terminó sobreviviendo al arrinconamiento blaugrana.