El arzobispo primado de México Carlos Aguiar ha pedido «desenmascarar» las teorías «graves y sin sustento» que circulan por las redes sociales sobre la vacuna frente a la Covid-19, desde aquellas que hablan de la implantación de un chip hasta las que dicen que contiene fetos abortados.
«Las teorías van desde la supuesta conspiración para modificar el AND humano y reducir la tasa poblacional, hasta otras que afirman que la vacuna contiene tejido de bebés abortados. Hay incluso quienes afirman que se busca implantar un microchip para espiarnos, son teorías realmente graves y sin sustento, que es necesario desenmascarar», ha subrayado Aguiar.
Según ha precisado el cardenal, es necesario «clarificar la importancia de la aplicación de la vacuna» no solo para «proteger la propia salud» sino también por el «deber de perseguir el bien común».
Así lo ha indicado este martes 19 de enero durante la inauguración de la ‘Conferencia Internacional: Los cristianos frente a las vacunas COVID 19’, organizada por la Academia Latinoamericana de Líderes Católicos con el objetivo de difundir la postura de la Iglesia Católica y promover la campaña de vacunación mundial.
Una decisión ética
Durante el evento, que se ha desarrollado de forma virtual y al que han asistido más de 40 obispos de 14 países, ha intervenido el cardenal arzobispo de Boston y presidente fundador de la Comisión Pontificia para la Protección de los Menores, Sean O’Malley, quien ha asegurado a aquellos que tienen dudas, que vacunarse contra la Covid-19 es «una decisión ética», que es «moralmente aceptable».
«Aseguramos a nuestros hermanos y hermanas católicos que la Iglesia está observando con mucho cuidado las implicaciones éticas de esta vacuna y quiere asegurar a todos que la decisión de vacunarse es una decisión ética y debemos alentar a la gente a hacer uso de este arma tan importante en la lucha contra la pandemia», ha subrayado.
El cardenal estadounidense ha precisado que, «aunque vacunarse es una elección personal, tiene consecuencias que afectan no solo al individuo sino también a los vecinos más vulnerables».
Papa Francisco
Por ello, considera que es importante que haya figuras públicas, líderes comunitarios que muestren en primera persona la importancia de vacunarse, como el Papa Francisco y el Papa emérito Benedicto XVI, que ya se han vacunado.
Si bien, ha precisado que, «en ocasiones, la diseminación de las enseñanzas de la Iglesia no han sido siempre claras y consistentes» por lo que ha aclarado que «en el caso de las vacunas producidas en respuesta a la Covid-19, las principales fuentes de la enseñanza de la Iglesia sobre vacunas están en completa armonía».
En concreto, sobre la teoría del uso de fetos abortados, el cardenal O’Malley ha indicado que, aunque «Pfizer y Moderna usaron una línea celular contaminada para una prueba, la conexión es remota» y, por tanto, «el recurso a tal vacuna no significa la cooperación con el aborto del que se obtuvieron las células».
En el acto también han intervenido la doctora Katarina Le Blanc, inmunóloga clínica del Instituto Karolinska de Suecia y miembro de la Pontificia Academia para la Vida, quien ha explicado cómo funciona el virus y ha subrayado la importancia de vacunarse para «protegerse y proteger a los demás»; y el extesorero del BID y presidente del Consejo Trust for the Americas, Enrique García Rodríguez, quien ha ahondado en el impacto social y económico la pandemia.