- La votación, que no es vinculante, tuvo 187 votos a favor y solamente dos en contra. Ucrania se abstuvo de votar.
Voz de América
La Asamblea General de la ONU votó mayoritariamente el jueves por el levantamiento del embargo económico que Estados Unidos mantiene sobre Cuba, en un resultado que superó el de años atrás.
La resolución A/78/L.5, presentada por Cuba, «insta una vez más a “Estados en los que existen y continúan aplicándose leyes y medidas de ese tipo a que, en el plazo más breve posible y de acuerdo con su ordenamiento jurídico, tomen las medidas necesarias para derogarlas o dejarlas sin efecto».
El embargo económico fue impuesto a la isla en 1960 por EEUU, como respuesta a las expropiaciones de empresas y capital de estadounidenses en Cuba.
La resolución contó con el apoyo de 187 votos, dos en contra –EEUU e Israel- y una abstención, la de Ucrania. Es la trigésimo primera vez que es aprobada desde 1992.
Una vez más, la Asamblea General rechazó por mayoría abrumadora el embargo que EEUU mantiene contra Cuba desde hace más de 6 décadas.
El resultado fue 187 votos a favor, dos en contra, los de Estados Unidos e Israel, y una abstención, la de Ucrania. https://t.co/BlTNeZKQPP pic.twitter.com/7Pjzu4If1f
— Naciones Unidas (@ONU_es) November 2, 2023
“Con saña y precisión quirúrgica se ataca a los sectores más sensibles de la economía y se busca deliberadamente infligir el mayor daño posible a las familias cubanas”, denunció el canciller cubano Bruno Rodríguez Padilla.
El representante estadounidense ante la ONU, Paul Folmsbee, volvió sobre el argumento de Washington de que estas medidas son «herramientas» de presión para que el país caribeño, de corriente socialista, abra su espacio a un ambiente de democracia y participación.
«Las sanciones son una serie de herramientas en nuestros esfuerzos amplios para que se adopte la democracia y fomentar el respeto a los derechos humanos en Cuba», explicó. «Por eso nos oponemos a esta resolución».
Las resoluciones de la ONU no tienen un carácter vinculante más allá de las decisiones propias de los gobiernos, pero son una expresión de consenso internacional sobre los diferendos en diversas partes del mundo.