José Luis Benito, el hombre de los Q122 millones en caleta, perseguido de Sandoval
Sorpresa para muchos, pero no para el círculo con el que –aparentemente– negoció su entrega el exministro de Comunicaciones, José Luis Benito, acusado por delitos de corrupción e investigado antes por el exfiscal Juan Francisco Sandoval (FECI), quien investigaba el caso de los Q122 millones en efectivo encontrados en Antigua y la forma en que se estaba utilizando el dinero de esa caleta del amigo de Jimmy Morales.
Esa fortuna de dinero fue encontrada en 22 maletas en el residencial Doña Beatriz, en Antigua Guatemala, en una casa arrendada por Benito a una inmobiliaria de un amigo. Sandoval especuló al anunciar el descubrimiento de la caleta, que ese dinero era producto de «coimas» –sobornos–, pero en los siguientes meses, aunque las investigaciones avanzaban, se dieron las primeras acciones para entorpecerlas a lo interno del MP.
Benito huyó en octubre del 2020 y se mantuvo prófugo hasta el pasado viernes, cuando «misteriosamente» se entregó en un tribunal de Mixco y está ahora a la espera de la audiencia de primera declaración. Fue capturado por el delito de lavado de dinero, el caso de la caleta y los Q122 millones, pero también por el libramiento de Chimaltenango, en donde se considera que hubo corrupción.
Pero en el ambiente hay varias interrogantes: ¿Por qué decide entregarse Benito después de más de un año de huir? ¿Qué relación o vínculo tiene el exministro con la actual alianza oficialista? ¿Cómo seguirá el caso la FECI ahora que no está al frente Juan Francisco Sandoval? ¿Era la de Antigua la única caleta que tenía Benito? ¿Está involucrado en los dos casos el expresidente Morales?
Las cuatro claves para entender la entrega
LA CAÍDA DE JUAN FRANCISCO SANDOVAL: El factor determinante para su entrega es la destitución de Juan Francisco Sandoval al frente de la Fiscalía Contra la Impunidad (FECI), porque se aparta del camino a quien no solo estaba investigando, sino que encontraba las pruebas suficientes para ir contra el Benito y quizás en contra de otros altos funcionarios de las administraciones de Motales y Alejandro Giammattei.
Lo que ha trascendido, es que Sandoval tenía indicios de que dinero de la caleta en Antigua había servido para apuntalar la campaña de Giammattei. Por medio de contactos de sus abogados, Benito había ofrecido ser colaborador eficaz en el caso, pero curiosamente la fiscal general, Consuelo Porras, no aceptó que se llevaran a cabo las negociaciones para concretar la entrega y escuchar sus declaraciones.
Con la salida de Sandoval, el caso pierde solidez en su investigación, como está sucediendo con otros casos. Eso hace que el temor del acusado disminuya, y haya buscado otra vía para entregarse, sin necesidad de ofrecerse como colaborador eficaz. Fuentes de todo crédito cercanas al MP, que pidieron no ser identificadas por temor a represiones, aseguran que desde diciembre pasado había contactos con el exaministro para concretar su entrega.
Aunque es difícil obtener declaraciones de funcionarios de la FECI, se sabe que esta fiscalía ni siquiera fue alertada sobre la entrega. La noticia la supieron al momento de la llegada de Benito al tribunal de Misco.
LA ACTITUD DE LA FISCAL GENERAL CONSUELO PORRAS: El segundo factor que hizo que el exministro decidiera entregarse se debe a la actitud que ha asumido la jefe del MP, pues ya no hay dudas sobre la forma en que está actuando para favorecer a la alianza oficialista. Esa es la razón por la que Estados Unidos la declaró corrupta y antidemocrática.
La misma fuente del MP asegura. que Benito sabe que la fiscal Porras actuará en este caso de la misma manera que lo hace en otros, permitiendo que se ponga en duda el trabajo de investigación de Sandoval y favoreciendo así al Benito. Obviamente ha tenido que recibir también seguridad que si hubiera cambio en el MP en marzo próximo, se le mantendrá la promesa de no sufrir una persecución acuciosa.
Prueba de este acuerdo, es que el MP no ha emitido comunicado ni ha dado declaraciones para refrescar los señalamientos contra Benito.
CONTROL DE JUECES Y CORTES: Como todos los procesos penales, los casos contra Benito se ventilarán en juzgados, salas de apelación y las altas cortes del país. En ese sentido, el exministro habría tenido la promesa de encontrar fallos favorables –leves–, tomando en cuenta que la mayor parte del sistema de justicias está controlado por la alianza oficialista.
Es oportuno recordar que el entonces juez Mynor Moto, favoreció en su momento a Benito, al negar la orden de captura solicitada contra él en el caso Libramiento de Chimaltenango. Moto sigue como prófugo de la justicia por delitos señalados precisamente por Sandoval y la FECI.
La alianza oficialista mantiene ilegal e irregularmente en sus cargos a la Corte Suprema de Justicia y a magistrados de sala, lo que termina siendo una forma de tener jueces y magistrados afines en los casos de corrupción que puedan plantearse.
YA NO ES PELIGROSO, PUÉS NO DEBE ACOGERSE A SER COLABORADOR EFICAZ: En la alianza oficialista y funcionarios del gobierno de Jimmy Morales hay alivio al lograr una entrega en los términos mencionados, pues Benito deja de ser un peligro que pudiera abrir una caja de Pandora, como se había especulado antes.
Ahora simplemente corre el riesgo de permanecer unos pocos años en cárcel y luego salir –procesos llevados a cabo sin fuerzas por el MP–. Al no ofrecerse ya más como colaborador efiza, Benito deja de ser visto como un peligro.
Preguntas que quedan sin respuesta
Finalmente hay consecuencias de todo esto, porque el caso de las caletas de Benito quedará sin resolverse de fondo, pero también se está cerrando la posibilidad a investigar si la de Antigua era la única caleta de este personaje. La teoría de la FECI en 2020 es que podría haber otras en lugares diferentes.
Tampoco se sabrá quienes fueron los que alimentaron aquella caleta –y tal vez otras–, porque la investigación se mantiene detenida en el MP.
Más difícil aún será determinar cuál era la relación entre ese dinero, producto de corrupción durante el gobierno de Morales, con el actual gobierno. en la FECI ahora se dice que no hay nada nuevo en torno a este caso.
Todo indica que Benito se verá beneficiado por una acusación sin mucho fundamento y que los personajes arriba de él no serán siquiera tocados, lo mismo que sucederá con las empresas de construcción que alimentaron la caleta y que siguen operando con impunidad en el país.