Congreso de Perú destituye a Pedro Castillo y de inmediato es detenido; hay nueva presidenta

  • En una sesión extraordinaria, el Legislativo de Perú votó por mayoría el dejar vacante la presidencia. Poco después, el ya expresidente Castillo fue arrestado a su salida del Palacio de Gobierno, tras intentar disolver el Congreso.
  • La vicepresidenta Dina Boluarte, fue juramentada como nueva presidenta peruana.

LIMA — El Congreso de Perú aprobó el miércoles a primera hora de la tarde la vacancia constitucional contra el presidente Pedro Castillo, en una votación que contó con 101 votos a favor de la medida.

«Defendiendo nuestra democracia y la Constitución, el #PlenoDelCongreso aprobó, con 101 votos a favor, la vacancia contra el presidente Pedro Castillo», informó el Congreso por medio de un tuit. Más tarde, también compartió en redes la resolución que declara la vacancia Castillo.

La decisión tuvo lugar poco después de que Castillo anunciara en horas de la mañana la disolución del Congreso, en un momento en que enfrenta varias acusaciones por actos de corrupción.

El último mensaje en redes sociales del depuesto presidente Castillo.

Durante la sesión plenaria, la vicepresidenta Dina Boluarte, quién asumió el cargo de presidenta poco después, para esta misma tarde, rechazó además la decisión de Castillo de suspender el Congreso.

“Rechazo la decisión de Pedro Castillo de perpetrar el quiebre del orden constitucional con el cierre del Congreso. Se trata de un golpe de Estado que agrava la crisis política e institucional que la sociedad peruana tendrá que superar con estricto apego a la ley”, aseguró Boluarte.

El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional señalaron que el artículo 134 de la Carta Magna señala claramente las causales de cierre del Parlamento. “Cualquier acto contrario al orden constitucional, constituye una infracción”, indicaron.

Castillo, bajo custodia policial

Tras la decisión del Congreso, Castillo fue detenido por la Policía cuando abandonaba el Palacio de Gobierno. El ya expresidente de Perú fue trasladado a la prefectura de Lima, a donde llegó la fiscal general, Patricia Benavides, para recoger sus descargos por haber tomado la decisión de disolver el Parlamento.

Castillo se encuentra acompañado por Aníbal Torres, quien se desempeñó como su ministro de Justicia y titular del Consejo de Ministros hasta hace unas semanas. Benji Espinoza y Eduardo Pachas, quienes eran sus abogados en los diversos procesos en la Fiscalía, renunciaron tras el anuncio del expresidente de disolver el Congreso.

Fuentes del Ministerio Público señalaron a la Voz de América que la Fiscalía General solicitará la prisión preventiva para Castillo por el presunto delito de conspiración al tratar de cerrar el Parlamento, cuya pena de cárcel podría ser de 20 años. Además, las seis investigaciones por casos de corrupción de su gobierno avanzarán más rápido.

La tesis del Ministerio Público es que Castillo sería el presunto jefe de una organización criminal «enquistada» en el Estado por los casos Puente Tarata III y Petroperú. También estarían involucrados sus exministros Juan Silva (Transportes) y Geiner Alvarado (Vivienda).

Castillo también es investigado por ascensos irregulares en las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional en noviembre del año pasado; así como por un «presunto encubrimiento» para no atrapar a los prófugos de su gobierno, entre ellos a Bruno Pacheco, quien fue secretario personal, y el supuesto plagio en su tesis de maestría.