El FC Barcelona tampoco falló este domingo en el cierre de la vigesimoctava jornada de LaLiga Santander 2020-2021 y continuó como el principal perseguidor del Atlético de Madrid tras salvar con más facilidad de la esperada la visita a una Real Sociedad, a la que borró del campo con una sonora goleada por 1-6.
El conjunto catalán no afloja en su persecución al líder y respondió con mucha contundencia a las victorias tanto de los de Diego Pablo Simeone como del Real Madrid para mantenerse a cuatro puntos de la cabeza y, además, afianzando las grandes sensaciones que arrastra desde hace tiempo.
Los de Ronald Koeman encadenaron su novena victoria seguida lejos del Camp Nou. Desde el duro traspié en el Ramón de Carranza, el Barça se ha encontrado muy cómodo como visitante, y siguió con su dinámica ganadora incluso en una salida tan teóricamente complicada como la del Reale Arena, otro refuerzo más en su remontada actual.
Ahí se topó con una Real Sociedad que no fue ese equipo aguerrido y atrevido que se esperaba y plantó ‘batalla’ hace unos meses en la Supercopa de España, y apenas pudo oponer resistencia a un rival que en dos ‘fogonazos’ al final del primer tiempo y al inicio del segundo, terminó por sentenciar el triunfo.
Los blaugranas arrollaron, pero no tuvieron un partido sencillo inicialmente, principalmente por el planteamiento de los de Imanol Alguacil. El técnico guipuzcoano tenía bajas sensibles como Silva, Guridi y Monreal, y a última hora se encontró la de Aihen Muñoz, por lo que tuvo que improvisar con Merquelanz como lateral izquierdo en un esquema más preocupado de cerrar huecos y de aprovechar las transiciones que del protagonismo que le gusta tener.
El Barça, apoyado de nuevo en su ya casi inamovible 3-5-2 que da un protagonismo a Dest y a Jordi Alba, ambos claves, se hizo con el mando sobre la manija de la mejor versión de Busquets, pero le costó encontrar los caminos hacia la portería de Remiro. De hecho, fue la Real la que pudo golpear primero por medio de Isak, su mejor jugador, que no acertó con su remate cercan ante el impasible Ter Stegen tras un fallo de De Jong en un despeje.
El Barça sentencia al inicio de la segunda parte
Pero con el paso de los minutos, el choque se fue inclinando hacia la portería realista, peligroso ante un equipo con el estado de ánimo actual como el que tiene el culé. Así, en seis minutos, del 37 al 43, los de Ronald Koeman encarrilaron la victoria con dos goles. El primero, obra de Griezmann tras recoger un rechace de Remiro a un disparo cercano de Dembélé tras asistencia de Alba y en una jugada que había empezado con un centro de Dest que había acabado en el larguero.
El segundo, obra de Dest, justo antes del descanso y después de que Ter Stegen volviese a solventar ante Isak otro error de su zaga, en este caso en la salida de balón. El lateral , obra de Dest, que ejecutó una gran asistencia de Messi en una jugada iniciada por el ‘cerebro’ de Busquets.
El paso por los vestuarios no trajo una mejor versión de una Real, que pareció tener la cabeza más pendiente en su cita histórica de la final copera ante el Athletic. Sin protagonismo de Oyarzabal, y con poco de Merino y Portu, el conjunto guipuzcoano no tuvo mostró recursos para meterse en el choque y sacó la ‘bandera blanca’ en otros tres minutos fatales. Alba volvió a hacer daño y Dest, ahora de rebote, hizo el 0-3 y poco después, el gran desmarque de Messi fue acompañado por un preciso pase de ‘Busi’ para acabar con cualquier atisbo de emoción.
El resto del encuentro fue ya ‘tranquilo’, con un conjunto ‘txuri-urdin’ que tampoco encontró el ánimo para intentar maquillar el resultado. De su poco ímpetu defensivo se aprovechó un fulgurante Dembélé para hacer el quinto, mientras que Barrenetxea mostró las cualidades de la cantera de Zubieta para firmar el mejor gol de una noche amarga para una Real, que no pudo evitar el sexto en la conocida conexión Alba-Messi.