- Presidente electo advierte que acciones del MP atentan contra el proceso electoral y la democracia y hace llamado a la población a que se sumen cuando presenten amparo ante la Corte de Constitucionalidad.
El presidente electo, Bernardo Arévalo exigió hoy renuncia de la fiscal general, Consuelo Porras y del fiscal Rafael Curruchiche, por estar realizando una persecución penal «que atenta con el orden constitucional», y anunció que se iniciarán acciones judiciales en su contra, lo mismo que contra el juez Fredy Orellana y la fiscal auxiliar Cinthia Monterroso
En un mensaje a la nación que circula en redes sociales, Arévalo denunció que las acciones que el MP realiza en contra del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y el Movimiento Semilla, son parte de una «persecución de parte de grupos y elites mafiosos», y dijo que solo la salida de los funcionarios mencionados «permitirá que prevalezca el orden constitucional en el país».
el mandatario electo anunció también que no continuará participando en la anunciada «transición» promocionada por el presidente Alejandro Giammattei como «la mejor que jamás ha habido en nuestra historia», pero que se lleva a cabo en medio del acoso del MP a todo el proceso electoral.
En horas de la mañana el fiscal Curruchiche encabezó personalmente el allanamiento de las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral (TSE), de donde secuestraron cientos de cajas que contienen los votos de las elecciones de primera y segunda vuelta. La presidenta del TSE ,magistrada presidenta, dijo al mediodía que las acciones del MP contravienen lo establecido por la Ley Electoral y de Partidos Político, superior a cualquier otra ley en materia de procesos electorales.
Con la declaración de esta tarde, Arévalo pasa a la ofensiva luego de soportar una serie de acciones dirigidas por la Fiscalía Contra la IMpunidad (FECI), por órdenes específicas de la fiscal general, Consuelo Porras.
Una fuente del MP asegura que «todo lo quye hace el fiscal Curruchiche es del conocimiento previo de la fiscal general», y por eso nunca ha existido una llamado de atención, a pesar de los evidentes ilícitos que esa fiscalía comete.
La FECI ha sido utilizada por el oficialismo y sus aliados para perseguir a operadores de justicia independientes, a periodistas y opositores.
De acuerdo con lo expuesto por el presidente electo, se han presentado sendas solicitudes de antejuicio en contra de Porras y el juez Orellana, quienes gozan de inmunidad por los cargos que tienen. En cambio contra Curruchiche y Monteroso se presentarán querellas penales por su actuación, evidentemente al margen de la ley.
AMPARO CON APOYO POPULAR
El presidente Arévalo hizo un llamado al pueblo de Guatemala para que «en los próximos días» cuando se presente un recurso de amparo para exigir que se respete la Constitución y el proceso electoral, «el pueblo nos acompañe» ante la Corte de Constitucionalidad.
Sobre la transición, dijo que la suspensión a participar se mantendrá, «mientras no haya condiciones» para seguir con ella. El mandatario guatemalteco dijo el pasado lunes que esta transición «es ordenada, transparente, como nunca antes en la historia», aunque para muchos observadores y analistas, esta declaración muestra que hay una doble cara en el oficialismo.
El Gobierno reaccionó inmediatamente indicando que «respeta pero no comparte» la decisión de Arévalo y que se mantiene la determinación de continuar con el proceso de transición «cuando las autoridades electas lo soliciten».
#ComunicadoOficial 🔴 | El Gobierno de Guatemala informa a la población: pic.twitter.com/AZD48KGlKq
— Gobierno Guatemala (@GuatemalaGob) September 13, 2023
Estas acciones iniciadas por el presidente electo y el Movimiento Semilla ponen a prueba todo el sistema de justicia, hasta ahora, actuando con corte oficialista. Tanto la Corte de Constitucionalidad como la Corte Suprema de Justicia, deben demostrar ahora si desean seguir supeditadas a las fuerzas oscurantistas que controlan el poder o si recuperan parcial o totalmente su independencia del poder político.