La canciller alemana, Angela Merkel, prometió hoy ayuda inmediata a los damnificados por las graves inundaciones en el oeste de Alemania y dijo que se hará todo lo posible «para que el dinero llegue rápido a la gente».
«Espero que esto sea cuestión de días», añadió Merkel durante su visita a Bad Münstereifel, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, sitio que sufrió graves daños tras las fuertes lluvias de la semana pasada.
La jefa del Gobierno alemán asumió que la reconstrucción de la infraestructura, incluso las carreteras y las vías férreas, así como de los edificios devastados por las aguas y el lodo requerirá varios meses y grandes esfuerzos.
Merkel visitó una sala donde se recogieron suministros donados para ayudar a los afectados, dialogó con efectivos de los equipos de rescate y con los habitantes de Bad Münstereifel.
Luego recorrió las calles para hacerse una impresión de la catástrofe, acompañada por el primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, Armin Laschet, candidato conservador para sucederla en el cargo en las próximas elecciones generales.
Renania-Palatinado
Merkel ya estuvo el fin de semana en la vecina Renania-Palatinado, donde se reunió con la jefa del Gobierno regional, Malu Dreyer. Por su parte, el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, se dirigió el sábado a Erftstadt, en Renania del Norte-Westfalia, otra ciudad devastada por las inundaciones y donde un enorme desprendimiento de tierras arrasó calles y casas en el distrito de Blessem.
La situación en Blessem sigue siendo tensa. Las autoridades han establecido una zona de seguridad de 100 metros alrededor del borde del desprendimiento. No se puede entrar en esta zona, especialmente en el borde, donde todavía hay un «peligro agudo para la vida».
No obstante, muchos residentes podrán volver a sus casas, al menos temporalmente en los próximos días, para asegurar sus pertenencias.
Daños
Los daños en la región afectada por las lluvias son cada vez más evidentes: carreteras, vías férreas, puentes, antenas de telefonía móvil, líneas de electricidad, tuberías de gas y agua potable están en gran parte destruidos.
La compañía estatal de trenes Deutsche Bahn señaló que unos 600 kilómetros de vías se vieron afectados en Renania del Norte-Westfalia y Renania-Palatinado.
- El número de víctimas mortales debido a las inundaciones ascendió ayer al menos a 164. Se confirmaron 117 muertes en Renania-Palatinado y 47 en Renania del Norte-Westfalia. No se descarta que puedan encontrarse más víctimas en ambos estados federados.
- Al mismo tiempo, hoy continuó el debate sobre la organización del control de catástrofes en Alemania. Muchos critican que las advertencias de los meteorólogos llegaron demasiado tarde a la gente. Además, se teme que el coronavirus se propague cada vez más durante los trabajos de limpieza en las zonas siniestradas y en los alojamientos de emergencia.
Tormentas
El fin de semana también se produjeron tormentas en algunas zonas de Baviera, en el sur del país. En el distrito de Berchtesgadener Land se produjeron desprendimientos e inundaciones. Los damnificados en Baviera van a recibir ayuda de emergencia, según declaró hoy el primer ministro bávaro, Markus Söder, a la radioemisora estatal Bayerischer Rundfunk.
Por su parte, el ministro de Transporte, Andreas Scheuer, pidió que en el futuro se alertara a la población por SMS sobre posibles inundaciones.
- En Alemania, los estados federados son responsables del control de las catástrofes. El Gobierno federal no tiene responsabilidades directas. Sin embargo, en caso de catástrofes naturales y accidentes especialmente graves, los estados federados pueden solicitar la ayuda de la Agencia Federal de Ayuda Técnica (THW) o de la Policía Federal.
- Después de unos días bastante veraniegos, el Servicio Meteorológico Alemán (DWD) espera el siguiente cambio de tiempo hacia el fin de semana, con chubascos y tormentas localmente fuertes provenientes del suroeste.