Real Madrid y Juventus se juegan la corona europea de clubes este sábado en Cardiff (12:45 hora Guatemala), en la final de la Liga de Campeones de fútbol, en un partido en que muchas miradas estarán puestas en Gianluigi Buffon, el prestigioso portero del equipo italiano, que a sus 39 años tiene tal vez la última oportunidad de ganar uno de los pocos títulos que faltan en su extenso palmarés.
El partido tendrá un duelo atractivo entre Buffon y del delantero del Real Madrid Cristiano Ronaldo, a los que muchas apuestan colocan como aspirantes al Balón de Oro, que podrían sumar puntos para ese galardón en la final de Cardiff. Hay que ser claro que a Cristiano se le da muy bien hacerle goles al portero italiano.
Con el Millennium Stadium, el templo del rugby galés, como escenario, la final reúne a un Real Madrid especialista en ganar finales de la competición más prestigiosa del mundo a nivel de clubes, con el récord de finales jugadas (14) y de títulos (11), frente a una Juventus al que la mala suerte le persigue en el torneo, con el mayor número de finales perdidas (6), aunque ha ganado la competición en dos ocasiones.
La final de Cardiff es una repetición de la jugada entre ambos en la misma competición en 1998 en Ámsterdam, cuando el Real Madrid se impuso por 1-0 a la Juventus, con un gol montenegrino Pedja Mijatovic.
Dani Alves, el lateral derecho del equipo italiano y exjugador del Barcelona, eterno rival del Real Madrid en la liga española, puso un poco de controversia al partido al afirmar el viernes en la rueda de prensa previa del viernes que el gol del conjunto blanco en aquel partido lo marcó Mijatovic «en fuera de juego».
Marcelo, lateral izquierdo del Real Madrid y compañero de Dani Alves en la selección brasileña, trató de alejar a su equipo de cualquier batalla dialéctica previa a la final.
«Es una final de Champions, a lo mejor (Dani Alves) intenta meter por otro lado… pero estamos centrados en lo nuestro, sabemos a lo que hemos venido, lo que tenemos que hacer, y eso no va a molestar para nada», afirmó Marcelo.
– Un partido sin favorito –
La final, entre los campeones de la liga española e italiana, no parece tener un claro favorito. Mientras los madridistas hablan de un cincuenta por ciento de posibilidades para cada equipo, los Juventinos tratan de colocar toda la presión en el equipo español, colocándole como máximo aspirante debido a su historial y experiencia en finales.
«Dicen que somos favoritos, pero es una final y en un partido puede pasar de todo. Ni somos favoritos nosotros, ni la Juve tampoco. Es un 50-50», afirmó el técnico del Real Madrid, Zinedine Zidane.
El entrenador francés respondía de esta forma a su colega italiano, Massimiliano Allegri, que repite una que su rival tiene el papel de favorito.
«El Madrid es favorito. Ha demostrado que en este momento es el equipo más peligroso del mundo», señaló el viernes en rueda de prensa.
El partido enfrentará a dos de las mejores delanteras del mundo, con Cristiano Ronaldo y Karim Benzema en el Real Madrid y los argentinos Gonzalo Higuaín y Paulo Dybala.
Cristiano y Benzema se verán probablemente acompañados de un Isco Alarcón en gran forma, que ocuparía el sitio del galés Gareth Bale, tercer componente de la delantera llamada BBC, que acaba de recuperarse de una lesión.
Bale, sea titular o entre como suplente en el curso del partido, tiene mucha ilusión en jugar este partido, que se juega en su ciudad.
Pero Buffon quiere ser el protagonista y hacerse con un título que falta en su palmarés, tras haber perdido las finales de 2003 y 2015 con la Juventus.
«Me gusta que se hable de que puedo optar al Balón de Oro, pero es algo secundario. Para mí lo que cuenta es ganar el sábado. Un triunfo en este partido sería el final perfecto a mi carrera», señaló Buffon.
El partido se disputará bajo un fuerte dispositivo de seguridad, dos semanas después del atentando de Mánchester que causó 22 muertos y más de 100 heridos.
Alrededor de 1.500 policías estarán activos durante el fin de semana.