El financiero de Wall Street Bernard Madoff, estafador de más de 50,000 millones de dólares, falleció este miércoles a los 82 años en una cárcel federal en Carolina del Norte (Estados Unidos) por causas naturales, según ha confirmado el Departamento de Prisiones del país a Europa Press.
A Madoff, expresidente del mercado electrónico de valores Nasdaq, se le condenó en 2009 a 150 años de cárcel, la mayor pena posible, por una estafa piramidal de más de 50,000 millones de dólares. En el momento de dictar sentencia, el juez la catalogó como la mayor estafa individual de la historia.
Estafa piramidal
Considerado durante décadas un gran gurú de las finanzas, Madoff , lo detuvieron en diciembre de 2008 por agentes del FBI en las oficinas de su firma de inversión tras haber confesado a sus hijos que durante 30 años había operado un esquema de Ponzi, una estafa piramidal, que le permitió estafar miles de millones de dólares a sus clientes.
Antes de su detención, Madoff también reconoció que el negocio de asesoría de inversión era un fraude y una «gran mentira» y afirmó estar «acabado» porque no tenía «absolutamente nada». De hecho, el inversor podría haber reconocido que contaba únicamente con unos 200 o 300 millones de dólares, que planeaba destinar a pagar a sus empleados, así como familiares y amigos.
El pasado junio de 2020, la Justicia estadounidense le denegó la libertad por motivos humanitarios. Madoff había pedido con anterioridad su traslado al domicilio de un amigo suyo para pasar allí sus últimos días de vida tras serle diagnosticado un fallo renal irreversible.
«Cuando condené al señor Madoff en 2009, mi intención era que se pasara el resto de su vida en prisión. De hecho, sus abogados habían pedido una sentencia de entre 12 a 20 años para que pudiera ver la luz del día, pero no consideré al señor Madoff merecedor de esa esperanza, y nada ha cambiado desde entonces», sentenció el juez a mediados del año pasado.