El FC Barcelona superó (5-1) con poco problema al Deportivo Alavés este viernes en la jornada 23 de LaLiga Santander, una goleada de la mano de Leo Messi, autor de un doblete y de peligro constante sobre la meta rival, enchufado de cara al regreso de la Liga de Campeones con el cruce ante el PSG.
- Los de Ronald Koeman cumplieron una semana más con la obligada suma de tres en la competición doméstica, en persecución al líder Atlético de Madrid.
- Los rojiblancos, que ganaron una horas antes en Granada (1-2), siguen ocho puntos por encima de un Barça que no afloja en su recuperación, con vista a otro gran objetivo.
Messi, inspirado
La ansiada Champions que no levantan desde 2015 volverá este martes al Camp Nou con la visita del PSG para la ida de octavos de final. El cuadro culé llegará con más garantías que hace unos meses y, sobre todo, con un Messi sonriente tras un verano traumático por su deseo de marcharse, enchufado como en sus mejores tiempos y disfrutando de Pedri y compañía.
El Alavés no pudo frenar al ’10’, que amenazó ya en los primeros minutos al igual que el resto del cuadro local. El Barça saltó con alto ritmo pero poco a poco el conjunto vasco ahogó el juego azulgrana en un embudo. Los de Abelardo se juntaron, dejaron las bandas, sin miedo ante la ausencia de Dembélé, y pasaron a vivir cómodos muchos minutos del choque en el Camp Nou.
VAR
Incluso a la contra parecía tener más peligro un Alavés que eso sí el primer descuido le costó el 1-0 de Trincao. El portugués, héroe para salvar el último triunfo ante el Betis, aprovechó el pase de gol del debutante Ilaix Moriba. La espalda de la defensa visitantes volvió a quedar al descubierto y el VAR anuló el 2-0 de Messi por un milimétrico fuera de juego en la jugada.
Sin embargo, el argentino se desquitó con un golazo de zurda antes del descanso que comenzó a pintar de azulgrana la noche. La reanudación fue del Alavés y, tras un aviso, Rioja logró el 2-1 en un fallo de Ilaix. La noche parecía tranquila para los de Koeman y así terminó siendo a pesar de que de nuevo perdonó el Barça ante un viejo conocido como Pacheco, autor de mil paradas a los culés.
Trincao, Griezmann y Messi tuvieron la sentencia que no se hizo esperar más, con el doblete finalmente del portugués, aprovechando lo que parecía otro tanto del argentino. El ’10’ aún tuvo tiempo de mandar un balón a la escuadra para el 4-1 y de repartir juego como en la acción del 5-1 de Junior. El Barça llega motivado y con cuentas pendientes a una Champions que prometió hace tiempo Messi.