El aplazamiento o cancelación del torneo de Wimbledon podría decidirse la próxima semana cuando los responsables del All England Club mantengan «una reunión de emergencia» en la que podrían tomar esta medida como consecuencia de la propagación del nuevo coronavirus.
Wimbledon debería comenzar el 29 de junio, pero la propagación del COVID-19 podría motivar la suspensión de la prueba, como ya ha hecho con otros grandes eventos deportivos, incluidos los Juegos Olímpicos, la Eurocopa y la Copa América de Fútbol, o el torneo de Roland Garros, otro de los Grand Slams de la temporada tenística.
El All England Club «puede confirmar que se continúa una detallada evaluación de todos los escenarios para The Championships 2020 (Wimbledon), incluido el aplazamiento y la cancelación, como consecuencia de la crisis del COVID-19», señalaron los organizadores en un comunicado.
«La dirección del club mantendrá una reunión de emergencia la próxima semana y antes de ella mantenemos comunicación constante con la Federación Inglesa de Tenis (LTA), la ATP, la WTA, la Federación Internacional de Tenis (ITF) y con los otros Grand Slams».
Como consecuencia de la pandemia, todos los torneos del circuito masculino ATP y del femenino WTA quedan suspendidos hasta el 7 de junio y se congelan las clasificaciones mundiales.
El torneo Roland Garros, gran cita de la temporada de tierra batida, que debía celebrarse del 24 de mayo al 7 de junio, se trasladó del 30 de septiembre al 4 de octubre y teóricamente comenzará una semana después de la final masculina del US Open.
Un aplazamiento para la segunda parte del año complicaría aún más el calendario del tenis mundial.
La presión aumenta sobre los organizadores de Wimbledon para que tomen una decisión, que no será la de disputar el torneo a puerta cerrada, una opción descartada por el All England Club.
Los preparativos del torneo «comienzan a finales de abril, pero en estos momentos, siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, el tiempo que tenemos para preparar Wimbledon es muy corto por la naturaleza de nuestra superficie (césped), por lo que el aplazamiento puede ser una opción».
«Jugar a puerta cerrada ha sido formalmente descartado», concluyeron los organizadores.