«Tuvimos muchas charlas con el cuerpo técnico y este es el primer partido para cambiar todo», añadió el centrocampista.
Fede Valverde compareció en la sala de prensa del Ortalyq Stadıon el día previo al encuentro de la segunda jornada de la fase de liga de la Champions League y analizó el encuentro de mañana (13:00) ante el Kairat Almaty.
«En lo futbolístico intentaremos cambiar lo del otro día, salir con otra actitud, ganar y tomarnos una pequeña revancha lo más rápido posible para cambiar la dinámica del otro día. El recibimiento de la ciudad fue increíble. Nos esperaron muchos aficionados madridistas y eso fue una locura».
«Al final fueron dos días muy duros. A nivel futbolístico estamos muy jodidos por lo que fue el partido del otro día. La derrota para nosotros fue un golpe muy duro. Charlamos mucho, tuvimos muchas conversaciones. Desde que estoy en el Madrid esto había sucedido pocas veces: nos juntamos a charlar e intentar cambiar la dinámica del grupo. Tuvimos muchas charlas con el cuerpo técnico y mañana es el primer partido para cambiar todo eso».
Sobreponerse al partido del sábado
«Al final llevamos muchos partidos, pero también poco tiempo del trabajo que quiere el nuevo entrenador. Nosotros tenemos que dar lo mejor de cada uno para que esas cosas se resuelvan lo antes posible. Hemos tenido dos derrotas y fueron muy duras: contra el PSG y la del otro día».
Actitud
«Son cosas que son parte del fútbol, pero nosotros como jugadores del Real Madrid tenemos que intentar que eso no pase. Debemos salir con otra forma y estar lo más agrupados dentro y fuera del campo para que las cosas vayan por el buen camino y sea un buen año».
Rendimiento personal
«Al final estoy frustrado, pero soy consciente de cómo estoy jugando. Soy el primero en saber cuándo las cosas no salen como uno quiere. El jugador de fútbol se da cuenta cuando hace un mal partido; es el primero en darse cuenta de cada jugada que no hizo bien dentro del campo. Es verdad que había empezado de muy buena forma en este proyecto con el nuevo cuerpo técnico en el Mundial de Clubes y después en estos siete partidos me ha costado sentirme más cómodo dentro del campo. Seguiré trabajando, creciendo y aprendiendo lo que quiere el nuevo entrenador.
Yo como uno de los capitanes seguiré liderando este grupo y dando la cara siempre que tenga la oportunidad dentro y fuera del campo. Siempre me caracterizó eso: sacar pecho y seguir adelante y voy a seguir de esta forma».
Jugar en la banda
«Al final uno siempre escucha críticas y siempre es bueno recibír un halago de otra posición. No nací para jugar de lateral, no crecí tampoco aprendiendo a jugar en esa posición. Fue por una emergencia que me tocó jugar ahí. Hacerlo de buena forma me llenó de orgullo, pero siempre tuve la duda de que en esos partidos haya tenido un poco de suerte y hayan sido noches esporádicas. Es verdad que jugando de lateral también me sentí muy cómodo; hemos ganado mucho cuando jugué por banda. Me tocó jugar de extremo y ganamos una Champions. Me tocó jugar en el medio y ganamos otra Champions.
«Uno intenta estar a disposición, aprender una nueva posición y estar a lo que quiere el entrenador. Es verdad que no me siento cómodo porque hay muchas cosas y virtudes que yo no las tengo, como cerrar atrás en defensa. Intento dar lo mejor de mí y demostrar actitud en esa posición.
Siempre dejo claro que yo crecí y jugué toda mi vida en el centro del campo; aprendí mucho lo que es estar ahí y tuve muchos jugadores que me dieron muchos ejemplos y consejos para crecer como futbolista en el centro del campo. De lateral siempre me ha ido muy bien y he dejado claro que estoy a disposición de lo que quiera el entrenador».