Un avión Boeing 777 de Rossiya Airlines ha aterrizado de emergencia este viernes en Moscú debido a problemas del motor, una semana después de que un avión del mismo modelo operado por United Airlines sufriera un incidente con una deflagración en uno de los motores.
El incidente de Denver causó la paralización de todos los aviones de este modelo con motor ‘Pratt & Whittney’, pero el avión que ha sufrido el problema en Moscú dispone de un motor de General Electric.
Según informa ‘Bloomberg’, el avión de Rossiya realizaba el trayecto entre Honk Kong y Madrid, pero la tripulación solicitó un aterrizaje de emergencia tras el fallo de uno de los canales de control del motor izquierdo.
El pasado 20 de febrero, un Boeing 747-400 de carga operado por Longtail Aviation sufrió un fallo en su motor Pratt & Whitney poco después de despegar de Maastricht. No obstante, según la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), este incidente no está relacionado con el de United Airlines.