Videos fuera de contexto o simulaciones antiguas sobre el avance del agua a tierras continentales son algunos de los contenidos virales que circularon tras el terremoto de magnitud 8,8 registrado en la península rusa de Kamchatka el 30 de julio, lo que derivó en una alerta de tsunami en varios países con cosas hacia el Pacífico. La desinformación inundó las redes sociales con contenidos que causaron asombro.
