Trump festeja condena de Weinstein pese a que él mismo es acusado de agresión sexual

La condena de Harvey Weinstein por agresión sexual y violación es «una gran victoria» para las mujeres, celebró el martes Donald Trump en Nueva Delhi, aunque el propio presidente de Estados Unidos es acusado de besar, manosear y violar a al menos 16 mujeres.

«Desde el punto de vista de las mujeres creo que fue algo grande», dijo Trump al comentar el veredicto del famoso productor de Hollywood desde India, donde realiza una visita de Estado.

«Fue una gran victoria y manda un mensaje muy fuerte», añadió tras recordar que nunca fue «un admirador» de Weinstein, gran donante de los demócratas, que enfrenta ahora una sentencia de cinco a 29 años de prisión.

«Era una persona que no me gustaba», dijo Trump a periodistas en Nueva Delhi, utilizando el veredicto para atacar a los demócratas en este año electoral.

«Simplemente no era su admirador. Lo conocía un poquito, no muy bien (…) Michelle Obama lo adoraba, Hillary Clinton lo adoraba. Entregó un tremendo dinero a los demócratas», afirmó.

Weinstein, de 67 años, fue hallado culpable el lunes de agresión sexual y violación, un veredicto histórico que inaugura «una nueva era» para el movimiento #MeToo al otorgarle su primera victoria en las cortes.

El productor cuyas películas ganaron 81 premios Óscar fue declarado no culpable de los cargos más graves que lo acusaban de ser un depredador sexual, por los cuales arriesgaba una pena máxima de cadena perpetua.

Weinstein debe aguardar su sentencia del 11 de marzo en la cárcel, pero pasó la primera noche en el hospital tras quejarse de dolores en el pecho y palpitaciones.

Denuncias de 16 mujeres

Trump, de 73 años, no mencionó en ningún momento que él mismo es acusado al menos por 16 mujeres de acoso o agresión sexual, aunque nunca ha sido inculpado ante la justicia por estos hechos.

La escritora estadounidense E. Jean Carroll asegura que fue violada por el presidente en un cambiador de la lujosa tienda Bergdorf Goodman a mediados de los años 90.

El delito ha prescrito, pero en noviembre demandó a Trump por difamación cuando éste dijo que nunca la habría violado porque ella no es su «tipo». En enero, Carroll pidió a la justicia que obtenga su ADN para determinar si es igual al material genético hallado en su vestido.

Otra mujer, Summer Zervos, una exparticipante en el programa de telerrealidad «El Aprendiz», asegura que Trump, que conducía el programa, la besó hace más de 10 años sin su consentimiento, refregó sus genitales contra ella y le tocó un seno. También ha demandado al mandatario por difamación.

Trump asegura que las denuncias de acoso sexual o agresión realizadas por al menos 16 mujeres en su contra son «mentiras» y «tonterías».

Durante su campaña electoral, en 2016, un video difundido por el diario The Washington Post mostró a Trump presumiendo en 2005 de que era tan famoso que podía agredir a la mujer que quisiera.

«Cuando eres una estrella, te dejan hacerlo. Puedes hacer cualquier cosa», dijo Trump. Y agregó: «Agarrarlas por el coño. Puedes hacer cualquier cosa».

Weinstein aparecía a menudo con los Clinton en cenas de recaudación de fondos y fiestas, aunque también ha sido fotografiado con Trump.

Una de las hijas de Barack Obama, Malia, fue becaria en The Weinstein Company en Nueva York durante varios meses en 2017, justo antes del estallido del escándalo en octubre de ese año.

La exsecretaria de Estado y presidenciable demócrata Hillary Clinton admitió el martes al margen del festival de cine de Berlín que Weinstein contribuyó a todas las campañas demócratas.

Pero señaló que «el veredicto del jurado habla por sí mismo». «Era hora de rendir cuentas», sostuvo.

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