El Gobierno de Estados Unidos ha comenzado a retirar a la mitad de sus diplomáticos de la Embajada estadounidense en Bagdad, Irak, según fuentes del Departamento de Estado, en medio de la escalada de tensiones con Irán, después del reciente asesinato del científico Mohsen Fajrizadé, considerado el director de su programa nuclear, y del cual Teherán responsabiliza a Israel, tradicional aliado de Washington.
- De acuerdo con la información ofrecida por estas fuentes al periódico estadounidense ‘Politico’
- la reducción de personal es «temporal»
- aunque debido a la situación actual, con la inminente salida del presidente, Donald Trump, de la Casa Blanca
- así como la cercanía del primer aniversario del asesinato llevado a cabo por Washington del general iraní Qasem Soleimani
- por el cual Teherán ya advirtió de que tomaría represalias,
- no está claro cuándo se ampliará de nuevo el cuerpo diplomático.
Entre esas «docenas» de diplomáticos y funcionarios que estarían ya dejando Irak, según estas fuentes, no estaría el actual embajador de Estados Unidos, Matthew Tueller, tal y como se ha encargado de confirmar el propio Departamento de Estado.
Oriente póximo
Irak se ha convertido durante años en el escenario en el que Estados Unidos e Irán dirimen sus diferencias por el control y la influencia en Oriente Próximo.
La amplia presencia de Washington en el país provoca que Teherán lance contra sus delegaciones diplomáticas los ataques de respuesta a las agresiones estadounidenses.
Los días posteriores al asesinato de Soleimani, Teherán lanzó varios misiles sobre algunos de los asentamientos militares que Estados Unidos tiene desplegados en Irak, lo que provocó las quejas de la Administración Trump, que amenazó con cerrar por completo su Embajada en Irak.