Un tribunal anticorrupción hondureño declaró culpable este martes a la exprimera dama Rosa Elena Bonilla de apropiarse de fondos públicos destinados a programas sociales durante el gobierno de su esposo, el expresidente Porfirio Lobo (2010-2014).
La sentencia, leída en audiencia oral pública, señaló a Bonilla como responsable de delitos de «apropiación indebida en forma continuada» de fondos públicos y «fraude».
El tribunal convocó para el próximo martes la definición de la pena, que podría oscilar entre 58 y 87 años de cárcel.
El portavoz de la Corte Suprema de Justicia, Melvin Duarte, indicó que una vez que se defina la pena las partes tienen 20 días para presentar un recurso de casación.
La esposa del expresidente Lobo está presa en una cárcel de mujeres en Támara, 10 km al norte de Tegucigalpa, desde el 28 de febrero de 2018, cuando fue detenida por la policía en su residencia.
La fiscalía, con la colaboración de la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (MACCIH), adscrita a la OEA, acusó a Bonilla de desviar el equivalente a 510.000 dólares a cuentas personales de una cuenta del Despacho de la Primera Dama, cinco días antes de que su esposo entregara el poder.
Los fondos estaban destinados al proyecto social «Calzando a los niños de Honduras», que consistía en donar zapatos a niños pobres.
La sentencia también declaró culpable a Saúl Excobar, excolaborador de la primera dama, y absolvió a otro exmiembro de su equipo, Mauricio Mora.
La MACCIH es un ente de la Organización de Estados Americanos (OEA) creado en enero de 2016 para colaborar con la fiscalía en la lucha contra la corrupción.