Las navieras son un medio de transporte vital para el comercio exterior, que genera ganancias para el país si funcionan adecuadamente, pero si hay paros se pierden millones en solo días; el año pasado se movilizaron 26.1 millones de toneladas métricas de mercadería, y para el 2016 se espera un incremento de al menos un 10 por ciento más.
A pesar del reciente paro realizado por pilotos del transporte terrestre pesado, algunos representantes del sector marítimo se muestran optimistas en cuanto a su crecimiento anual, principalmente en lo que a importaciones se refiere.
Se estima que en Guatemala operan más de 20 empresas navales, aunque el año pasado fueron cuatro las que movilizaron casi la mitad de la carga marítima.
Los principales productos que se trasladan por medio de los puertos son carbón, búnker, maíz, trigo y otros minerales como níquel y hierro a granel. La tasa de crecimiento de las toneladas métricas movilizadas en todos los puertos, entre 2014 y 2015 fue 9 por ciento, según el estudio Carga Marítima de Guatemala, elaborado por CentralAmericaData.COM.
Importación de vehículos
La empresa estadounidense Port to Port, líder en la importación de vehículos usados, incrementó este año sus operaciones en un 53.25 por ciento en Guatemala y en la región centroamericana.
Es una empresa que crea valor económico y social en los países donde opera, los resultados presentados hoy reafirman el potencial indiscutible que ha alcanzado el mercado automotriz en Guatemala y la región, dice Jimmy Avendaño, gerente general de Port to Port.
Análisis internos de la naviera agregan que las importaciones de automóviles livianos y pesados ocupan el 80 por ciento de su portafolio, mientras que un 20 ciento es de carga general. El mercado automotriz de vehículos usados se ha mantenido en constante crecimiento en Guatemala, según datos publicados por la SAT, a septiembre de este año la importación ha aumentado un 40 % en comparación del año 2015.
El movimiento de mercadería por mar se da a través de la Empresa Portuaria Quetzal, Santo Tomás de Castilla, Puerto Barrios y las Boyas de San José, en el Puerto de San José, Escuintla.
La principal ruta marítima que tiene el país para transportar su mercancía es Estados Unidos y países asiáticos, y se estima que cada año recibe más de tres mil buques.
La actividad de transporte, almacenamiento y comunicaciones tiene una participación de 10.3 por ciento en la economía del país, y las navieras esperan que con la ampliación del canal de Panamá se reciban más buques en Guatemala y los demás países de Centroamérica.
Sin embargo, no todo es ganancia para el país, ya que se perdieron en exportaciones marítimas unos US$113.8 millones, a causa de seis días de paros de los pilotos en los puertos de Santo Tomás y Puerto Quetzal.
Consecuencias del fallo del transporte
Sobre los daños que ocasiona a la economía las deficiencias en los distintos medios de transporte de mercadería, Cristian Álvarez, director del Centro de Análisis de las Decisiones Públicas de la Universidad Francisco Marroquín, opina que, por ejemplo, la ciudad de Guatemala compra más barata la cebolla de Jutiapa y las zanahorias de Almolonga, gracias a las carreteras.
Además, que los guatemaltecos se benefician de las computadoras de Japón, de los celulares de China, los vinos de Argentina y las medicinas de la India, gracias a los puertos y aeropuertos.
Si los costos de transportar los bienes suben, los beneficios para los compradores y vendedores bajan. La infraestructura es vital para aprovechar las ventajas del comercio, que se resumen en precios más bajos, agrega Álvarez.
¿Es importante el ferrocarril?
Estados Unidos y Argentina lograron altos niveles de riqueza a principios del siglo XX, en parte por su red de ferrocarriles, los trenes llegaban a todo el país. El transporte en ferrocarril es más barato, explica.
Respecto a los daños que ocasionan los paros en el transporte, el economista añade que generan gastos adicionales, pues unos pierden más que otros, dependiendo del producto.
Por ejemplo, un gasto que no se ve y existe es el aumento de riesgo país. Los compradores de fresas de Canadá ven que es mejor negociar con otros proveedores, pues en Guatemala hay muchas posibilidades de retrasos.
Sobre los paros, la forma en que actúa el acalde Álvaro Arzú es la peor alternativa, opina el académico, pues la falta de diálogo solo polariza, y manda el mensaje que no podemos resolver nuestras diferencias y que tiene que ser con huelgas o con el uso de la fuerza.