El gobernador del estado estadounidense de Texas, Greg Abbott, y altos funcionarios estatales redactaron este miércoles una carta en la que autorizan un «pago inicial» de 250 millones de dólares para la construcción de un muro fronterizo entre el estado y México.
Abbott anunció hace una semana su intención de construir este muro para frenar la migración y ahora, junto a los funcionarios, pidió al director ejecutivo del Departamento de Justicia Criminal de Texas, Bryan Collier, que el área transfiera esta cantidad de los ingresos generales a un fondo de desastres.
Así, reclama un esfuerzo por «asegurar la financiación suficiente para la respuesta continua de Texas a esta crisis».
«Aunque asegurar la frontera internacional y proteger la vida y la propiedad de sus ciudadanos que rodean esa frontera es el deber del Gobierno federal, la Administración actual ha demostrado una y otra vez una falta de voluntad para abrazar esta responsabilidad fundamental», critica desde el estado en la misiva.
Anticipo
En la misma, señalan que la financiación es un «anticipo» para «comenzar el diseño y la construcción de barreras físicas en terrenos privados y públicos donados voluntariamente que limitan este estado con México».
También, apunta al «fracaso» del Gobierno de Joe Biden por el aumento de la inmigración irregular, «daños» en tierras, drogas y «una peligrosa escalada de violencia de los cárteles».
El gobernador ordenó también a la Comisión de Instalaciones de Texas que contrate a un director de proyecto, que comenzará a estudiar la longitud del muro, su ubicación y su coste total, recogen medios locales.
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