Fujairah, Emiratos Árabes Unidos
La tensión subía este lunes en el Golfo donde varios navíos fueron objeto de
«actos de sabotaje», según Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos,
mientras el jefe de la diplomacia estadounidense Mike Pompeo modificó su agenda
para discutir sobre Irán con los responsables europeos.
«Estamos muy preocupados por el riesgo de que haya un conflicto por accidente a raíz de una escalada involuntaria en ambos lados», afirmó el canciller británico, Jeremy Hunt, antes de reunirse con sus homólogos europeos y Pompeo en Bruselas.
Las autoridades de Arabia Saudita, aliada de Estados Unidos, indicaron «actos de sabotaje» contra navíos saudíes frente a las costas de Emiratos Árabes Unidos, otro país cercano a Estados Unidos que reforzó su presencia militar en el Golfo en el contexto de la tensión con Irán.
«Dos petroleros saudíes fueron objeto de actos de sabotaje en la zona económica exclusiva de Emiratos Árabes Unidos, frente a las costas del Emirato de Fuyaira cuando estaban a punto de entrar en el golfo de Arabia», dijo el ministro de Energía Khalid Al Falih, citado por la agencia oficial SPA.
El domingo, Emiratos Árabes Unidos hablaron también de «actos de sabotaje» contra cuatro navíos comerciales de distintas nacionalidades en el este del emirato de Fuyaira, sin identificar a los autores, pero calificando de «grave» el suceso.
En Irán, las autoridades juzgaron «preocupantes» los «actos de sabotaje» contra navíos frente a las costas de Emiratos y pidieron una investigación.
«Estos incidentes en el mar de Omán son preocupantes y lamentables», dijo Abas Musavi, portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores en Teherán, que pidió una investigación y advirtió contra el «aventurismo» de «actores extranjeros» en la zona para perturbar la navegación marítima.
Todas las bolsas del Golfo caían el lunes a media jornada, incluyendo Riad (-2,7%), Dubái (-3,7%) y Abu Dhabi (-3%).
El canal de noticias Sky News difundió imágenes de uno de los barcos saudíes con el nombre de «Al Marzoqah».
Acto criminal
El ministro saudita de Energía aseguró por su parte que las acciones contra los petroleros saudíes no provocaron ni víctimas ni marea negra pero sí «daños significativos a las estructuras de dos navíos».
Uno de los dos petroleros iba rumbo a recibir su carga de petróleo en el terminal saudita de Ras Tanura para una entrega a clientes estadounidenses, precisó el ministro.
Más tarde el ministerio saudita de Exteriores condenó este acto criminal que supone una seria amenaza a la navegación marítima y una incidencia nefasta para la paz y la seguridad regional e internacional.
Igual que Emiratos Árabes Unidos, Arabia Saudita no designó a ningún responsable. Ambos países tampoco detallaron de qué tipo de actos de sabotaje se trata.
Por ahora, estos actos de sabotaje son un misterio.
Sin embargo, el domingo el gobierno de Emiratos Árabes Unidos pidió a la comunidad internacional tomar responsabilidades para evitar que se cometan este tipo de acciones por partes que buscan atentar contra la seguridad de navegación.
El puerto de Fuyaira es el único terminal en Emiratos Árabes Unidos situado en la costa del mar de Arabia, que evita pasar por el estrecho de Ormuz, por donde circulan la mayoría de exportaciones de petróleo del Golfo.
En varias ocasiones Irán amenazó con cerrar este estrecho estratégico, crucial para la navegación mundial y los suministros petroleros, en caso de enfrentamiento militar con Estados Unidos.