- Se esperan temperaturas más elevadas durante el fin de semana
- También hay crisis energética por 150 millones de equipos de aire acondicionado en el país
El primer ministro de India, Narendra Modi, ha recomendado a los estados del país que activen de nuevo la alerta por ola de calor ante una nueva subida de las temperaturas este próximo fin de semana en todo el país, buena parte del cual acaba de padecer el abril más caluroso en más de 120 años.
Las temperaturas diarias han alcanzado máximas medias de 44º y las medias nocturnas no han bajado de 30º. La semana pasada, un vertedero de 17 pisos de altura a las afueras de la capital, Nueva Delhi, entró en combustión espontánea, cubriendo la ciudad de una capa de polución que se añadió a la ya existente en la capital, donde el aire en los días de calor es prácticamente irrespirable.
En lo que se refiere al coste humano y a falta de datos nacionales, de momento se sabe que al menos 25 personas han muerto en el estado de Maharastra, en el oeste del país y que se suman a los 17.000 fallecidos que han dejado las olas de calor en India desde 1971 hasta 2019, según un estudio publicado el año pasado y recogido por el ‘Hindustan Times’.
Esta semana, el Departamento Meteorológico de India (DMI) ha avisado que en las próximas horas los estados de Maharashtra, Vidarbha, Rayastán, Haryana, Uttar Pradesh, Madhya Pradesh, Vidarbha y Delhi volverán a ser escenario de un repunte de las temperaturas, no tan alto como el de los últimos dos meses, pero lo suficiente como para que el primer ministro haya declarado la emergencia.
El primer ministro también ha pedido a los estados que activen su plan contra inundaciones ante el peligro del deshielo imprevisto de sus glaciares, como también ha ocurrido en Pakistán, asolado igualmente por el calor.
Asimismo, y como recoge la cadena NDTV, el mandatario ha pedido la adopción de todas las medidas posibles contra incendios espontáneos y la disminución de los tiempos de respuesta a emergencias, así como la ejecución de inspecciones periódicas de seguridad en los hospitales, en especial las alas de pacientes de COVID, dada la inestabilidad frente a las altas temperaturas de las volátiles botellas de oxígeno que necesitan los pacientes.
A ello hay que añadir la crisis energética derivada del uso de aparatos de aire acondicionado, que emplean 140 millones de personas en todo el país. Sin embargo, esta cantidad solo representa el 12 por ciento de la población, lo que significa que cientos de millones de personas no pueden refrescarse ante un golpe de calor.
Hay que recordar que India usa carbón para la generación de electricidad y las autoridades están operando trenes adicionales que transportan carbón a los estados para superar la escasez, informan los medios nacionales.
Según la Organización Meteorológica Mundial, «es prematuro atribuir el calor extremo en India y Pakistán únicamente al cambio climático», sin embargo, continúa la agencia, «es consistente con lo que esperamos en un clima en proceso de transformación».