Telefónica cerró este jueves por 900 millones de euros el tramo latinoamericano de la venta de torres de Telxius a American Tower Corporation, lo que le permitirá reducir 500 millones de euros de deuda.
La operación, cuyo tramo europeo fue aprobado el pasado martes, engloba la venta de 7,000 torres de telecomunicaciones situadas en Latinoamérica (Brasil, Perú, Chile y Argentina), según ha comunicado la multinacional española a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Con el cierre de la venta de la vertiente latinoamericana de estas instalaciones, solo quedaría pendiente la adquisición por parte de American Tower del segundo tramo de la venta de torres implicadas en el acuerdo alcanzado entre Telxius y Telefónica Alemania, que se prevé para el mes de agosto.
Esta operación, que comprende 4,400 emplazamientos, permitirá otra reducción de 700 millones de euros de deuda.
Telefónica ha subrayado en un comunicado que, con estas operaciones, acelera la ejecución de su plan estratégico, centrado en la gestión activa de los negocios y basado en la creación de valor y la reducción de deuda.
En total, la empresa reducirá aproximadamente 4,600 millones de euros de deuda con esta operación, lo que unido a la ‘joint venture’ con Liberty Global en Reino Unido, se traducirá en una reducción de la deuda neta de Telefónica de 9,000 millones de euros, hasta situar su endeudamiento en 26.000 millones de euros.
La plusvalía atribuible a Telefónica del conjunto de estas operaciones se estima ascienda aproximadamente a 3,600 millones de euros, según la compañía, que ostenta la participación mayoritaria de Telxius, donde comparte accionariado con el fondo KKR y Pontegadea, el brazo inversor de Amancio Ortega.
American tower
American Tower, por su parte, ha señalado que al igual que la operación anterior, esta ha sido financiada con liquidez y préstamos de sus líneas de crédito.
La compañía espera generar ingresos equivalentes 70 millones de dólares en los tipos de cambio actuales (57.43 millones de euros) con unos márgenes brutos de 40 millones de dólares (32.8 millones de euros).
Tom Bartlett, consejero delegado de la empresa, ha destacado las «atractivas oportunidades» para la aceleración de los despliegues 4G y 5G en la región, así como la permanencia de Telefónica como «cliente ancla» de los emplazamientos vendidos.
«Esperamos desarrollar un fuerte y sostenible crecimiento a largo plazo y retornos atractivos en la región, mientras ayudamos a conseguir conectividad de banda ancha móvil para cientos de millones de personas», añadió.