- Mientras, aumenta malestar de pobladores del municipio en contra del alcalde Javier Gramajo y su corporación
Villa Nueva amanece consternada y su población indignada ante los sucesos que se vienen dando en el municipio y tras conocerse este lunes que se ha suspendido la búsqueda de de una madre y su hija que se encuentran en la caverna que se abrió el pasado sábado, en la carretera, en donde cayeron dos vehículos.
De acuerdo con los testimonios, Adolfo Mejía Itzep fue rescatado el mismo sábado y trasladado al hospital Roosvelt, en donde narró que viajaba en un auto negro junto a su esposa Olga Emilia Choz y su hija menor Helen Mishel, cuando se produjo la tragedia.
A medida que pasan las horas, la posibilidad de encontrar con vida a las dos mujeres se reduce y el anuncio de que se ha suspendido la búsqueda por «la inestabilidad del terreno», aumenta la zozobra sobre este drama que afecta a una familia.
«No podemos poner en riesgo la integridad física de los rescatistas» , ha explicado Byron Morataya, portavoz de la comuna, mientras el malestar popular contra el alcalde Gramajo cobra fuerza entre los vecinos.
En este momento se cree que varias decenas de comercio situados en las inmediaciones del socavamientos «están en serio peligro», de acuerdo a las autoridades de Conred.
Los vecinos se preguntan si no hay relación entre el primer hundimiento en la ruta al pacífico y este otro, tomando en cuenta que es el mismo recorrido del colector.
El agujero se abrió muy cerca del ocurrido hace algunos meses en la ruta al sur, aunque el alcalde Javier Gramajo niega que no se haya verificado la condición del colector, tomando en cuenta que el socavamiento viene del mismo. «Nosotros verificamos que estuviera en buenas condiciones», asegura el alcalde.
La población empieza a mostrar su indignación en contra del funcionario edil, al que consideran como «sobrepagado», lo mismo que su corporación municipal, la mejor pagada de todo el país, según los datos consignados.