La gimnasta estadounidense Sunisa Lee logró la medalla de oro en el concurso completo de gimnasia artística femenina para suceder así a su compatriota Simone Biles, gran protagonista de la cita al borrarse de ella por su salud mental, mientras que la brasileña Rebeca Andrade fue plata y la rusa Angelina Melnikova, bronce, en una prueba que terminó antepenúltima la española Roxana Popa.
Sunisa Lee, de 18 años, hereda el oro que no pudo defender Simone Biles y permite a Estados Unidos conquistar la quinta medalla de oro olímpica consecutiva en el concurso completo individual de gimnasia artística.
La joven gimnasta, en sus primeros Juegos Olímpicos, brilló en las barras asimétricas –aparato en la que fue la mejor– y estuvo muy bien en salto de potro, además de cumplir en barra y suelo, para colgarse el oro con una puntuación final de 57.433, por delante de los 57,.298 de Andrade y los 57.199 de Melnikova.
En una final que presenció en directo Simone Biles, la gran ausente al priorizar su salud mental tras retirarse previamente en plena final completa por equipos, Sunisa Lee heredó su corona y su medalla de oro.
No obstante, lo hizo con suspense, pues un mejor ejercicio de suelo de Andrade, con dos errores al salirse en dos ocasiones en dos acrobacias, habría dado el oro a la brasileña. Pero Lee, que previamente había superado a la mejor del equipo del Comité Olímpico Ruso, respiró tranquila al ver que era medalla de oro, sumada a la plata por equipos.
Se quedaron fuera del podio, pero cerca, la rusa Vladislava Urazova y la japonesa Mai Murakami, que no pudo optar al bronce ante los suyos. La única representante española, Roxana Popa, terminó 22ª y en antepenúltima posición, destacando en salto de potro con 14.600, su mejor actuación, y una puntuación final de 51.533.