Cuando el Real Madrid —Zinedine Zidane— y el Atlético de Madrid —Diego Simeone— se enfrenten en Milán el 28 de mayo para disputar la Copa de Europa, dos estilos de juego diferentes buscarán la primacía. Ambos entrenadores tienen en común que fueron grandes deportistas y ahora como técnicos cada uno traslada su personalidad a la plantilla de jugadores. Los dos tienen la capacidad de brindar al mundo un atractivo espectáculo.
Carlos María Salvado
Madrid –Diego Simeone, el Cholo, fue un medio centro con gran capacidad defensiva, el cual podía ir también al ataque. Batallador incansable. Así juega el Atlético de Madrid bajo su dirección.
Zinedine Zidane, Zizou, era un genio con el balón, muy técnico y amante del fútbol ofensivo y vistoso. Ese sello está imponiendo cada vez más al Real Madrid.
Son dos estilos diferentes de jugar y de dirigir, pero no cabe duda de que la final de la Copa de Europa’2016 promete ser disputada de principio a fin, sin un favorito claramente marcado, por más que la plantilla de los merengues tenga un valor que dobla a la de los colchoneros.
El Cholo no se deja intimidar por las 10 Orejonas —copas de Europa— del Real, y por eso destaca que en el fútbol la historia no juega partidos, y que en el máximo nivel de competencia, los partidos los ganan los que mejor hacen las cosas, quienes tienen más fuerza para alzarse con la victoria.
La mejor tarjeta de presentación de este Atlético son su impecable defensa y la garra con la que cada uno de sus jugadores se mantiene a lo largo de los 90 minutos. Esa fue la clave que le permitió dejar en el camino a dos de los mejores clubes del mundo, el FC Barcelona y el Bayern Munich, ambos considerados superiores y favoritos para llegar a la final desde el inicio de la competencia. Ninguno de ellos marca a los madridistas jugando en el Calderón.
Zizou, en cambio, tomó una plantilla que jugaba a medio vapor y paulatinamente la ha ido cambiando, hasta llevarla al nivel que corresponde por la calidad de jugadores que tiene. Aun con lesiones consecutivas ha ido sacando resultados con miras a no dejar pasar una segunda temporada sin títulos, algo que la afición blanca no perdona.
La final está al 50 por ciento, ha anticipado el francés, quien respeta a su rival, pero sin dejar de soñar con alzar su primer trofeo como entrenador, y qué mejor si es una copa con valor continental. Tenemos la capacidad, el talento y las ganas de conquistar ese partido, dice Zidane, antes de explicar: Llegamos en buen momento y espero contar con todos los jugadores para el viaje a Italia.
Los jugadores de ambos clubes españoles parecen responder bien a la idea de juego de sus entrenadores. Los colchoneros gladiadores del fútbol, mientras que los merengues buscan más la explosión técnica de cada uno de sus jugadores. Que a nadie le extrañe que en Milán, el Real tenga más posesión del balón y el Atlético apueste por un contragolpe. No por nada se han convertido en expertos en ganar por poco margen sus partidos más importantes. Un gol es suficiente si sabemos defendernos, es la explicación del Cholo.
Similitudes entre ambos
No siempre es fácil hacer comparaciones en los deportes. Como entrenadores, Simeone tiene ya un recorrido importante con dos títulos en Argentina, una Liga española —incluida Supercopa—, y una Liga Europea de la UEFA. Este Madrid es el primer equipo que entrena el francés a este nivel.
Como jugadores ambos destacaron y ganaron casi todo. Ligas por donde pasaron, copas y más. En sus selecciones nacionales, los dos usaron el 10 en el dorsal, aunque Zizou sí alzó una Copa del Mundo en Francia’98, mientras que el Cholo nunca fue campeón mundial.
Ambos jugaron en Italia y en España en los equipos que ahora dirigen. Incluso en una ocasión se enfrentaron con la camisola puesta en un torneo de liga. Ese derbi se disputó en diciembre de 2003 y tuvo características diferentes para ellos.
El fenómeno Ronaldo sorprendió a todos a los 16 segundos de juego, con un arranque impresionante, que incluyó un caño al propio Simeone, quien quedó sentado viendo como anotaba el brasileño. El partido terminó 2-0 con otro gol de Raúl, pero aquel equipo Galáctico fue muy superior al Atlético. La defensa rojiblanca, comandada por el Cholo no estuvo afortunada esa noche.
Antes de eso, en su paso por Italia, ambos llegaron a enfrentarse en seis ocasiones. En el Calccio, los números son favorables al argentino, porque ganó en tres ocasiones, empató en dos, y solamente perdió una vez. Zizou jugó solamente para la Juventus, mientras que el Cholo lo hizo primero con el Inter de Milán y luego para la Lazio de Roma.
Finalmente, como la sangre de futbolistas corre por sus venas, no está demás destacar que los dos tienen hijos futbolistas. El argentino sigue de cerca a Gio, un delantero que ha destacado en las menores de River Plate y en la Selección juvenil argentina, mientras que el francés ve como se desarrolla Enzo en sus capacidades, quien ya es un jugador destacado del Castilla, la cantera madridista.
Un derbi especial
Si bien, Simeone tiene razón al decir que la historia no juega, es interesante destacar que estos dos clubes han mantenido una rivalidad muy grande a lo largo de los torneos de Liga, pero también se han enfrentado a nivel continental. La última vez en Lisboa’2014, un juego estratégico que podría ser parecido este año.
En aquella ocasión, el Real era dirigido por Carlo Ancelotti, pero su segundo era nada menos que Zidane. En el otro lado ya estaba el Cholo.
Al minuto 36 el defensa Diego Godín, sorprendió al batir a Iker Casillas, y luego los rojiblancos se defendieron como fieras hasta el minuto 92, cuando otro defensa, Sergio Ramos, empató el partido y lo mandó a la prórroga. Cerca estuvo el Atlético de su primera Copa de Europa. Bale, Marcelo y Cristiano se encargaron de sentenciar el partido y acabar con el sueño del Cholo.
Ambos clubes se han enfrentado en 275 ocasiones, con 145 victorias blancas, 61 empates y 69 triunfos colchoneros. En Liga de Campeones han tenido seis enfrentamientos directos y el saldo se repite: cuatro triunfos del Real Madrid, un empate y únicamente una victoria del Atlético de Madrid.
La historia no juega, pero ahora habrá que esperar para ver si el Cholo es capaz de demostrar que su garra y constancia puede más que la estrategia ofensiva de Zizou.