Un sismo de magnitud 5.3 sacudió este domingo a Zagreb, dejando un adolescente gravemente herido según medios oficiales croatas, y provocando daños materiales y escenas de pánico, que llevaron a las autoridades a pedir a la población que no se congregue por temor a propagar el coronavirus.
El temblor ocurrió a las 06H00 local (05H00 GMT) e hizo que numerosos habitantes abandonen a toda prisa sus viviendas para reunirse en las calles, como constató una periodista de AFP.
La aguja de la catedral del casco histórico de Zagreb y fachadas de varios inmuebles resultaron dañadas por el sismo.
En la confusión, médicos citados por la agencia local Hina anunciaron la muerte de un adolescente de 15 años aunque luego rectificaron la información y precisaron que se trataba de una joven que fue reanimada y se encontraba en estado crítico.
Hay otras personas con «heridas», pero la mayoría no serían de gravedad, según Damir Trut, del servicio de protección civil.
De acuerdo con el Centro Sismológico Euromediterráneo (C-SEM), el epicentro del sismo se situó a unos 7 kilómetros al norte de Zagreb. El sismo se sintió en el sur de Austria y en Eslovenia.
El ministro del Interior Davor Bozinovic pidió a la población permanecer en la calle pero evitar reunirse en grupos para no facilitar la propagación del coronavirus, del cual se han detectado en Croacia unos 200 casos.
«Mantengan la distancia. no se agrupen. Estamos enfrentados a dos crisis serias, el sismo y la epidemia», declaró.
Varias zonas de la capital quedaron sin energía eléctrica, constató la periodista de AFP.
El edificio del parlamento también resultó dañado.
Alrededor de una hora más tarde, la ciudad fue sacudida por un nuevo temblor, de magnitud 5.
Los Balcanes se encuentran sobre una gran falla sísmica y registran terremotos de baja intensidad a menudo.