SERIE MUNDIAL | Azulejos empatan y aseguran que la final regrese a Toronto

  • Los Azulejos de Toronto consiguen triunfo clave en el juego 4 de la Serie Mundial 6-2 sobre los Dodgers de Los Ángeles y empatan 2-2. Con esto aseguran que la serie regrese a Toronto.

El partido se disputó en el Dodger Stadium tras el histórico partido anterior de 18 entradas entre ambos equipos, donde los Dodgers se impusieron. Con la serie 2-1 a favor de Los Ángeles, los Blue Jays tenían necesidad de responder y empatar.

Los Dodgers abrieron el marcador en la segunda entrada gracias a un sacrificio de Kiké Hernández que impulsó a Max Muncy, poniendo el 1-0 para Los Ángeles.

En el tercer inning, los Blue Jays respondieron con un jonrón de dos carreras de Vladimir Guerrero Jr. frente a Shohei Ohtani, dándole a Toronto la ventaja 2-1.

Vladimir Guerrero Jr. respondió en el momento justo y le pegó cuadrangular a Shohei Ohtani.

El partido se mantuvo muy parejo hasta el séptimo inning, en el cual los Blue Jays explotaron: sumaron cuatro carreras en esa entrada gracias a una combinación de hits oportunos (incluyendo de Bo Bichette y Addison Barger) y errores de los relevistas de los Dodgers, estirando el marcador a 6-1.

En términos de pitcheo, Shane Bieber lanzó de forma competente para Toronto, conteniendo al poderoso lineup de Los Ángeles. Por su parte, Ohtani, que salía a lanzar apenas 17 horas después del maratón del Juego 3, permitió varias carreras y acabó siendo retirado antes de que el bullpen de los Dodgers mantuviera el ritmo.

Los Dodgers no pudieron remontar: su ofensiva quedó limitada, y la ventaja construida por los Blue Jays fue suficiente para asegurar la victoria y empatar la serie

Reactivación mental y física de Toronto

Tras la dolorosa derrota en 18 entradas en el Juego 3, los Blue Jays mostraron resiliencia. Supieron resetear, atacar cuando había que hacerlo (tercera entrada) y luego romper el partido con un inning clave (séptimo). Esto muestra una fortaleza mental importante: no se dejaron aplastar por el desgaste físico o emocional que implicaba venir de un juego tan largo.

Ohtani bajo presión de desgaste

Shohei Ohtani protagonizó un rendimiento especial en el juego previo, pero el desgaste se notó: lanzar en corto descanso, luego pedirle batear, utilizar energía tanto en el montículo como al bate, todo ello parece haber generado una merma en su efectividad.

Aunque todavía mostró destellos de grandeza, los Blue Jays aprovecharon sus momentos vulnerables. Esto plantea una interrogante acerca de cuántos turnos más puede mantener ese nivel “dos-vías” sin que la fatiga pase factura.

El bullpen de los Dodgers falla en el momento decisivo

Cuando el juego estaba parejo, el bullpen de Los Ángeles fue incapaz de cerrar el séptimo inning sin ceder carreras. En contraste, los relevistas de Toronto cumplieron con su labor: se les demanda hoy más que nunca que “aguanten” en el tramo medio-tardío del juego, y ellos lo hicieron. En una serie tan pareja, este tipo de detalles pesan mucho.

Fórmula ganadora para Toronto

Ataque oportuno: batear jonrones en momentos clave, convertir rallies en entradas productivas.

Pitcheo que limita al rival: contener al lineup de los Dodgers, que tiene talento ofensivo de élite.

Gestión del desgaste: venir de un partido maratónico y responder al siguiente con frescura.

Esta combinación ha nivelado la serie, y el hecho de que la Serie Mundial ahora se traslada posiblemente a Toronto le da ventaja de localía a los Blue Jays.

Con el 2-2 ahora, la serie se pone “al mejor de tres” o “al mejor de lo que quede”, donde cada juego cobra aún más importancia.

Los Dodgers pierden el impulso que habían tras la victoria de 18 entradas; Toronto toma moral, lo cual puede inclinar la balanza.

La gestión del pitcheo y el descanso de los jugadores será clave: el desgaste no solo psicológico, también físico, empieza a jugar.