Ryanair retomará a partir de julio el 40% de sus vuelos, obligando a pasajeros y tripulantes a tomarse la temperatura antes de embarcar y a usar mascarilla durante el viaje, anunció este martes la compañía aérea.
«Ryanair operará un programa diario de casi mil vuelos, restableciendo el 90% de su red de itinerarios previa a la COVID-19», dijo la compañía con sede en Dublín.
La tripulación y los pasajeros de la compañía aérea de bajo coste tendrán que llevar mascarillas y someterse a controles de temperatura.
Además «se alentará» mantener la distancia en los aeropuertos y en los aviones.
«Es importante para nuestros clientes y para nuestra gente poder volver a parte del programa normal a partir del 1 de julio», dijo el director ejecutivo de Ryanair, Eddie Wilson, el segundo de la compañía por detrás de Michael O’Leary.
Según él la reanudación de casi la mitad de los vuelos de Ryanair «permitirá a las economías basadas en el turismo como España, Portugal, Italia, Grecia, Francia y otras recuperar lo que queda de la temporada turística anual».
Ryanair tiene previsto suprimir 3,000 puestos de piloto y personal de cabina, cerca de un 15% de su plantilla, para hacer frente a las consecuencias de la pandemia, especialmente importantes en el sector aéreo.