- Altos funcionarios de Estados Unidos y Guatemala revisaron la cooperación económica entre ambos países, y acordaron continuar la colaboración en proyectos clave para impulsar el desarrollo.
Voz de América
Salomé Ramírez Vargas
WASHINGTON — A seis meses de la creación del Diálogo Económico de Alto Nivel entre Estados Unidos y Guatemala, ambos países reforzaron durante una reunión de seguimiento su intención de continuar la colaboración en proyectos clave para impulsar el desarrollo mutuo.
El subsecretario José W. Fernández y el ministro de Finanzas de Guatemala, Jonathan Menkos, presidieron el encuentro virtual que se realizó este martes, y que también tuvo presente a representantes del Departamento de Agricultura, USAID, representantes de la embajada de Guatemala en Washington, entre otros.
Esta revisión de mitad de año, según el Departamento de Estado, «marca un momento importante en nuestra relación bilateral, mostrando nuestro compromiso compartido con la prosperidad económica inclusiva y el crecimiento transformador».
El Diálogo Económico de Alto Nivel es el primero de su tipo que EEUU emprende con un país de América Central.
Fernández y Menkos acordaron durante la reunión «continuar trabajando juntos en los cinco pilares» del acuerdo que comprenden buena gobernanza, promoción de inversiones, agricultura y seguridad alimentaria, seguridad energética y remesas para el desarrollo.
Entre las estrategias implementadas por ambos gobiernos se encuentra un programa de certificación ofrecido por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos (CBP) en Guatemala para «brindar a los funcionarios de aduanas de Guatemala, El Salvador y Honduras habilidades y conocimientos críticos para una gestión eficaz de aduanas y fronteras».
Por otro lado, un grupo de funcionarios estadounidense viajará este mes a Guatemala para asesorar a las agencias locales sobre el desarrollo de un sistema de metro en la capital del país.
La colaboración incluye financiamiento estadounidense para fomentar el desarrollo de la infraestructura, asistencia técnica para la elaboración de leyes antimonopolio y apoyo a esfuerzos de resiliencia climática.
Los funcionaros determinaron que se reunirán de nuevo en 2025 en Washington con el fin de analizar nuevamente el alcance del acuerdo.