Hay un actor del partido que decidirá el próximo campeón de la Europa League que ya ha vencido, pase lo que pase en la final
Torpedo en toda la línea de flotación de las grandes multinacionales de ropa deportiva Nike y Adidas. El rey de la Europa League (además del Sevilla con sus cuatro títulos) es la casa estadounidense New Balance, que viste tanto al equipo andaluz como al Liverpool, los dos finalistas de la competición.
Este año nos ha tocado la lotería, aseguran en la sede en España de la marca, aunque los éxitos en su desembarco en el mundo de fútbol, más que a la suerte se deben a una detallada planificación.
New Balance ha realizado importante apuesta económica para meter la cabeza en el fútbol de alto standing, ya que fichó al Liverpool a cambio de 422 millones de euros en seis temporadas y al Sevilla por unos 11 kilos hasta el 2018. Y esta operación ha tardado unos pocos meses en comenzar a dar sus frutos, ya que solo tenían cinco equipos clasificados para la Champions y la Europa League: Sevilla, Oporto, Liverpool, Celtic y Odds BK.
Indudablemente, para nosotros se trata de un partido histórico, además de un escaparate mundial impresionante para la marca. Es el escenario ideal al que aspiramos todas las empresas que nos dedicamos a esto, dicen desde New Balance, asegurando que las ventas van sobre ruedas y que sea cual sea el resultado en Basilea, quien seguro saldrá ganando será la marca.