El canciller Dominic Raab, quien tomó las riendas del gobierno británico mientras el primer ministro Boris Johnson se encuentra en cuidados intensivos debido al coronavirus, carece de los mismos poderes que el titular.
Estas son algunas de las principales cuestiones sobre la situación jurídica en el Reino Unido.
¿Quién está al mando?
Antes de ser trasladado a cuidados intensivos el lunes, Johnson pidió a Raab, que también es primer secretario de Estado, «que lo sustituyera en lo que fuera necesario», según un portavoz de Downing Street.
Raab ya había presidido la reunión diaria del gobierno sobre el coronavirus el lunes, después de que Johnson fuera hospitalizado para someterse a unas pruebas, y se hizo cargo de nuevo el martes por la mañana.
Debe recibir los informes diarios enviados a Johnson en su «caja roja». También coordinará el trabajo de otros ministros a cargo de subcomités gubernamentales sobre áreas específicas de la lucha contra el coronavirus, como la asistencia sanitaria o el respaldo a las empresas.
¿Cambiará la respuesta británica al coronavirus?
Raab fue rival de Johnson en la carrera por el liderazgo del Partido Conservador el año pasado, pero el lunes insistió en que seguirá el plan del primer ministro para hacer frente al covid-19.
«El enfoque del gobierno seguirá siendo asegurarse de que las instrucciones del primer ministro (…) se lleven a cabo», afirmó.
El Reino Unido decretó el confinamiento obligatorio el 23 de marzo: se dijo a la población que se quedara en casa salvo pocas excepciones y la mayoría de comercios y servicios están cerrados.
Sin embargo, estas medidas deben revisarse la próxima semana.
El ministro del gabinete, Michael Gove, aseguró que la decisión no se retrasará y será tomada «colectivamente», aunque Raab tendrá la última palabra si Johnson no está en condiciones de hacerlo.
¿Qué pasa con la seguridad nacional?
Tobias Ellwood, presidente del comité de defensa de la Cámara de los Comunes, advirtió de que el Reino Unido debe estar preparado para hacer frente a «un intento de aprovechar cualquier debilidad» por parte de sus «adversarios».
«Es importante tener 100% claro dónde recae ahora la responsabilidad de las decisiones de seguridad nacional», escribió.
Gove aseguró que «es Dominic como ministro de Relaciones Exteriores quien está a cargo».
¿Puede Raab extralimitarse?
No existe en el Reino Unido un rol constitucional de primer ministro en funciones o de vice primer ministro.
El país está gobernado formalmente por el gabinete, e incluso el primer ministro, aunque tiene ciertos poderes, sólo puede gobernar con el apoyo de los ministros del gabinete.
«Raab debe tener cuidado (…) de no sobrepasar los límites de la autoridad que se le ha dado», considera Bronwen Maddox, directora del centro de reflexión Institute for Government (IfG).
En su opinión, los miembros del gabinete «se van a unir» dadas las circunstancias extraordinarias, pero si continúan las aparentes tensiones sobre la estrategia a seguir, Raab podría enfrentar dificultades.
«Es más difícil para un substituto del primer ministro ejercer realmente autoridad frente a las divisiones si éstas aparecen», dijo a la radio BBC.
¿Cómo se hizo esto en el pasado?
Durante la Guerra Fría, los primeros ministros británicos nombraban «adjuntos nucleares» encargados de decidir qué hacer en caso de que el jefe del gobierno quedara incapacitado o fuera de contacto.
Pero las reglas no son rígidas.
El IfG recordó que en 1953 el entonces primer ministro Winston Churchill supuestamente sufrió una apoplejía. El sustituto más obvio, el ministro de Relaciones Exteriores Anthony Eden, estaba en el hospital siendo operado, y al final la noticia se ocultó a la mayoría del gabinete y Churchill siguió adelante como si nada.
¿Qué sucede si muere Johnson?
Aunque exista el cargo de primer secretario de Estado, esto no significa que su titular asuma automáticamente el control.
Según el IfG, corresponde al gabinete recomendar colectivamente un sucesor inmediato a la reina Isabel II, quien lo nombra oficialmente para que asuma el cargo.
«Esto podría hacerse con la expectativa de que su papel sea temporal, a la espera de la elección de un nuevo líder del partido», señala.
Pero como no existe un cargo formal de primer ministro en funciones, la persona designada permanecería en el poder «hasta que decida renunciar o su gabinete la obligue a hacerlo».