Con la confianza de los títulos coperos, pero lejos de sus mejores prestaciones: el PSG, ganador a penales de la Copa de la Liga el viernes ante el Lyon (0-0; 6-5), no ha alcanzado aún su pico de forma antes de los cuartos de final de la Liga de Campeones, el gran objetivo de la temporada.
Los parisinos cuentan aún con once días por delante antes de medirse con el Atalanta, luego de haber tenido que digerir cuatro meses sin partidos oficiales. Esa será la última misión esta temporada de un PSG que el miércoles se enfrentará en partido amistoso al Sochaux (Ligue 2), en el último test para ajustar las piezas antes de la ‘Final 8’ de la Champions a partir del 12 de agosto.
«El Atalanta tiene una gran ventaja sobre nosotros, es el ritmo. Ellos juegan mucho así que tienen el ritmo necesario, es una ventaja para alcanzar el mejor nivel», declaró el técnico alemán del PSG Thomas Tuchel.
En rodaje
Sin apenas tiempo de celebrar su primer triplete francés con el PSG (Liga, Copa, Copa de la Liga), Tuchel salió al paso de las críticas a su equipo por su escaso bagaje ofensivo desde la reanudación tras el parón.
«Sí, siempre tenemos suerte, pueden escribir eso si quieren. Es sólo suerte, es así. No tenemos cualidades, sólo la suerte«, respondió con ironía ante la prensa.
«Muéstrenme un equipo que marque 4 o 5 goles en todos los partidos de la temporada, no es posible. En mi opinión está claro, ustedes buscan siempre lo negativo. Hay 99 puntos positivos, pero se busca el 100º punto«, añadió.
Pero lo cierto es que salvo Neymar, autor del único gol parisino en 210 minutos de juego, o Marco Verratti, en gran forma tras el regreso, el balance ofensivo del PSG es discreto.
Y apenas ha aparecido el argentino Mauro Icardi, llamado a paliar la marcha del uruguayo Edinson Cavani. Por si fuese poco, Ángel Di María se perderá por sanción el duelo de cuartos.
Pablo Sarabia, pese a su condición de suplente de garantías, no ha podido respaldar a un Neymar muy aislado sobre el césped.
Mbappé, el eslabón que falta
Todo ello hace se eche aún más en falta la figura de Kylian Mbappeé.
«Sin Kylian, tenemos muchas cualidades pero adolecemos de velocidad para atacar más rápido», reconoció Tuchel. «Tenemos que encontrar otras soluciones. Hablamos de ello antes del partido y sabíamos que sería duro».
Sin ‘KM’, del que partió la jugada del gol de la victoria en la Copa de Francia el 24 de julio antes de lesionarse en el tobillo derecho, el técnico alemán optó por un 4-3-3 más prudente, con Marquinhos en la medular.
Aunque este plan B otorgó más jerarquía a Neymar, ha vuelto el juego del PSG demasiado previsible a ojos de sus rivales. Lejos de las rápidas combinaciones con Mbappée.
Pero no se descarta una milagrosa recuperación a tiempo del veloz campeón del mundo, según su compañero Ander Herrera: «Somos optimistas con Kylian. Puede caminar tranquilamente. Él es muy profesional, es joven. Él quiere jugar y podemos estar muy tranquilos. Trabaja todos los días, mañana y tarde, estoy seguro de que intentará jugar».
Pero el PSG deberá evitar nuevas lesiones antes de la gran cita.
Marquinhos y Thiago Silva sufrieron calambres contra el Lyon, y Layvin Kurzawa una «pequeña lesión» en el muslo. Una baja del lateral sería una pésima noticia en un sector en que Juan Bernat aún está en fase de recuperación.
La cuenta atrás para el gran reto está activada.