En toda esta maliciosa estrategia, lo más importante es lograr un sistemático desgaste en Semilla, sus dirigentes y, particularmente, su binomio presidencial ganador. Sabemos que los golpes de Estado abandonaron sus formas tradicionales, convirtiéndose, ahora, en una compleja mezcla de variantes que dejaron atrás, incluso, los golpes técnicos. En lugar de enfocarse en la transición y la puesta en marcha de su plan de gobierno y principios partidarios, casi toda su energía se consume en la defensa legal, la convocatoria social y el temor que las huestes neofascistas cumplan con extremos criminales que para nada son extraños e inéditos en estas tierras».
José Alfredo Calderón E. (Historiador y analista político)
Incontables personas y organizaciones han escrito sobre la multiplicidad de escenarios que se presentan con respecto a la toma de posesión (o no) del binomio ganador: Bernardo Arévalo y Karin Herrera. Algunos con propiedad metodológica y otros más influídos por las emociones y la opinión propia o asumida de la mezcla de otros.
Los factores/actores y las variables que intervienen son diversas, siendo el Lawfare[i] el eje transversal, veamos algunas posibilidades:
- Movimiento Semilla: Conseguir
- su debilitamiento o cancelación.
- Diputados electos: Sin respaldo partidario, con una merma organizacional o con una estratagema que les impida tomar posesión.
- Binomio presidencial: Persecución “legal” y política a Bernardo Arévalo para desgastarlo, impedir su toma de posesión o defenestrarlo, ya como presidente en el cargo. Al parecer, la vicepresidenta electa no despierta tantos temores, pues la posibilidad de nombrar un vice con funciones factuales de presidente por parte del Congreso, es una de las tantas tácticas viables para la alianza criminal.
- Partidos políticos: Los únicos aliados naturales de Semilla (WINAQ-URNG y VOS) así como los partidos conservadores que tomaron alguna distancia de la alianza criminal (CABAL y VIVA) también fueron atacados para bloquear cualquier alianza futura con Semilla. El resto, la gran mayoría, orquestados contra el partido reformista ganador.
- Comunidad Internacional y EE. UU. Los primeros sin mayor peso factual, a no ser por las declaraciones inusualmente contundentes de la Unión Europea y OEA. Los norteamericanos, normalmente no exceden la tradición diplomática en sus comunicados, pero en esta ocasión subieron el tono[ii]. Sin embargo, sin sanciones económicas al Estado antidemocrático y depredador, todo queda en poesía y apoyo moral.
- Movimiento Social y Sociedad Civil: Inexistente el primero en término de masas y la segunda, conformada por un grupo de dirigentes de ONG sumamente disminuidos cuantitativa y cualitativamente.
- Iglesias: Los protestantes mantienen su tradicional carácter conservador y de afinidad al poder de turno. La Iglesia Católica/Conferencia Episcopal (CEG) perdió su beligerancia social hace años, pero particularmente más, desde que asumió Gonzalo de Villa como Arzobispo. La única que mantiene su posición a favor de la justicia, la verdad y la democracia es CONFREGUA, una combinación de laicos y religiosos que no tienen el poder político de la CEG.
- Empresarios: Una mayoría no avala el descomunal ataque contra la propia democracia y el Estado de derecho que ellos diseñaron e impusieron; sin embargo, el CACIF ya no representa el poder real sino es el G-8, que lo conforman las ocho corporaciones decimonónicas y monopólicas más grandes y fuertes de Guatemala. Por eso, la contradicción entre los comunicados de las cámaras por separado y del CACIF como su ente administrativo-político, con relación al apoyo subterráneo que un grupito ultramontano de empresaurios (sic) mantiene a sus operadores de alto nivel, tanto dentro del Estado (MP-OJ-CC-Congreso y Ejecutivo) como entre los Cuerpos Ilegales y Aparatos Clandestinos de Seguridad (CIACS) siendo ellos Fundaterror, Liga ProPatria, AVEMILGUA y Guatemala Inmortal.
- Medios de Comunicación: Salvo excepciones como Prensa Comunitaria y La Hora, totalmente cooptados.
- Pueblos Indígenas: Todavía sin representar un solo ente aglutinador por su propia naturaleza, pero destacan 48 Cantones y alcaldías indígenas, los más beligerantes.
- Sindicatos y organizaciones sociales: Los primeros, cooptados; mientras que las segundas (CODECA fundamentalmente), representaron un tiempo la movilización social, pero la desaparición de su instrumento político (MLP) le asestó un golpe durísimo del que difícilmente se recuperarán, sin perjuicio de su posición reacia (post elecciones) para apoyar el voto democrático.
En todo este cóctel, no podemos descartar el acto desesperado del magnicidio que, si bien tiene una factibilidad menor, no solo sigue siendo una amenaza real, sino que abona a la táctica del miedo en una tríada perversa: Lawfare, bloqueos de todo tipo y desgaste multidireccional.
Permítaseme utilizar el recurso histórico para explicar esta tríada. De 1954 a 1985 hubo una dictadura militar directa, pero se les coló un binomio civil por medio de elecciones en 1966 (los abogados sancarlistas Julio César Méndez Montenegro y Clemente Marroquín Rojas). La forma de arreglarlo fue el famoso Concordato (sobre lo que ya he escrito) que no fue más que un pacto que el alto mando del ejército obligó a firmar al binomio electo, así como al secretario general del Partido Revolucionario (oficial), en el que transferían todo el poder a los castrenses, siendo el gobierno civil solo una fachada.
Otro suceso paradigmático se dio cuando asumió Vinicio Cerezo en 1986. El ejército sometió al nuevo gobierno mediante sendos golpes de Estado técnicos en los meses de mayo de 1988 y 1989. Como si fuera poco, la “advertencia” se selló con el asesinato de Iván Danilo Barillas Rodríguez el 1 de agosto de 1989. Barillas era un líder nato y seguro hubiera sido candidato presidencial en 1990, pues gozaba de gran popularidad.
El último ejemplo que mencionaré es el de Alfonso Portillo, que, viniendo de las izquierdas, concretizó su ambición política postulándose con el Frente Republicano Guatemalteco del general José Efraín Ríos Montt de abierta tendencia ultraconservadora. Ingenuamente, en torno al nuevo presidente, se formó un grupo autodenominado portillistas, los cuales creyeron hacer contrapeso a las huestes ultraconservadoras de la familia Ríos y sus secuaces. Portillo terminó preso y extraditado a Estados Unidos y los discursos incendiarios de Pollo Ronco quedaron en eso: discursos.
Sirva este largo preámbulo para explicar mi lectura actual sobre el futuro inmediato de los eternos casi 4 meses que quedan, hasta la toma de posesión.
Continuará el lawfareen formas variadas pero sistémicas por parte de la alianza criminal, minoritaria, pero con mucho peso político y económico. También permanecerán las falsas declaraciones gubernamentales y empresariales de apoyo a la democracia y el Estado de derecho. Los bloqueos de toda índole seguirán a la orden del día, excediendo las formas y el marco legal.
En toda esta maliciosa estrategia, lo más importante es lograr un sistemático desgaste en Semilla, sus dirigentes y, particularmente, su binomio presidencial ganador. Sabemos que los golpes de Estado abandonaron sus formas tradicionales, convirtiéndose, ahora, en una compleja mezcla de variantes que dejaron atrás, incluso, los golpes técnicos. En lugar de enfocarse en la transición y la puesta en marcha de su plan de gobierno y principios partidarios, casi toda su energía se consume en la defensa legal, la convocatoria social y el temor que las huestes neofascistas cumplan con extremos criminales, que para nada son extraños e inéditos en estas tierras.
Históricamente, las élites económicas siempre han impuesto los gabinetes y definido las líneas de acción de los gobiernos de turno. Sin embargo, por primera vez, no financiaron al partido y binomio ganador, por lo que su dominio tiene un contrapeso no previsto.
Sabedores que todas las medidas impulsadas contra Semilla han fracasado y que una salida gorilesca implica muchos costos, solo les resta el deterioro continuo y asfixiante, a efecto de lograr que los electos cedan y concedan a los dueños de esta finca las exigencias que demandan. Dejo dos preguntas para que cada quien responda:
¿Alcanzará el apoyo de EE. UU., único actor beligerante que puede inclinar balanzas?
¿Mantendrá Bernardo Arévalo, ahora devenido en líder nacional, el compromiso con los miles de ciudadanos/as que votamos por un cambio real y no cederá?
LEE ADEMÁS:
[i] El uso de procesos legales para inmovilizar políticamente o destituir a quienes ocupan cargos públicos en un país. La palabra combina Law (ley, derecho) y warfare (guerra o conflicto) y se traduce del inglés como guerra jurídica. Se refiere a la utilización abusiva o abiertamente ilegal de las instancias judiciales nacionales e internacionales, aparentando legalidad para inhabilitar o provocar repudio popular contra un oponente.
[ii] Hablo del momento histórico concreto actual, pues EE. UU. abandona su discurso diplomático e interviene por la fuerza (1954 el caso paradigmático) cuando ve que sus intereses en el patio trasero son amenazados.