CR7 salió lesionado, y cuando parecía que Francia podría levantar la copa como campeón de Europa en París, el corazón luso cambió el rumbo del partido. Con un solo juego ganado en 90 minutos, el flamante campeón de la Euro ha escrito una página histórica: está entre los grandes del deporte rey, pero el camino ha sido largo y difícil.
Fernando Villalobos / fvillalobos@cronica.com.gt
Portugal ha logrado hacerse un espacio en la historia del fútbol. La Euro 2016 es el primer gran torneo que gana la selección lusitana. El corazón de un país se paralizó con la salida de Cristiano Ronaldo, provocada por una lesión, pero la selección cobró coraje y no solo emparejó el cotejo, sino que además terminó ganando el torneo ante la frustración de los locales.
En Copas del Mundo, la selección ibérica no ha sido un participante constante, con solamente seis presencias. Su mejor participación fue en la primera incursión que tuvo en Inglaterra 66, cuando alcanzó el tercer puesto con el liderazgo y juego explosivo de Eusébio La Pantera de Mozambique, que además, fue el goleador del torneo con nueve goles.
Tras su gran papel en ese mundial, debieron pasar veinte años para que la selección lusa volviera a un Mundial, esta vez México 86. El papel de los europeos sería muy distinto al de dos décadas atrás, pues fueron eliminados en fase de grupos y de vuelta a casa. Portugal ya no contaba con aquella figura histórica y poco pudo hacer.
Luego siguieron tres eliminatorias infructuosas a la Copa del Mundo. Fue nuevamente una estrella galáctica, Luis Figo, quien toma el liderazgo e impulsa a la selección para ir a la copa Corea-Japón 2002. Pero ni Figo, acompañado por Pauleta y Raúl Costa, fueron capaces de pasar la primera ronda, superados entonces por el anfitrión Corea y Estados Unidos.
Desde entonces, Portugal ha entrado a formar parte de la élite mundialista.
De nuevo dijo presente en Alemania 2006, que sería la primera Copa del Mundo con su nueva estrella, Cristiano Ronaldo, en ese entonces un joven de tan solo 21 años. CR7, entonces en el Manchester United, fue pieza clave para alcanzar las semifinales, donde sería víctima precisamente de Francia, con un inspirado Zinedine Zidane —ahora su entrenador en el Real Madrid— que se encargó de dejarles en el camino, aunque finalmente quedaron en un importante cuarto lugar.
Los Mundiales de Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, no fueron tan buenos. En el primero fueron eliminados por España, a la postre Campeón del Mundo, mientras que en Brasil, Estados Unidos se hizo cargo de relegarlos en un grupo que integraba el futuro campeón, Alemania.
La primera
En las Eurocopas, Portugal tampoco ha sido una selección constante, con únicamente siete presencias. Su mejor participación fue también la más frustrante, en 2004, cuando siendo el país anfitrión perdió la final ante una sorpresiva Grecia que no aparecía entre los favoritos. Era la primera vez que un anfitrión perdía una final, triste marca que ahora comparten con Francia.
Para Francia 16, los lusitanos llegaban a octavos del ranking FIFA y favoritos en su grupo, pero no se les consideraba aspirantes a la corona. Y las cosas no fueron fáciles desde el principio, aun con Cristiano en uno de sus mejores momentos, pero intermitente en la competencia. La aventura principió con un empate (1-1) ante Islandia, la Cenicienta que se transformó en la Euro y llegó a ser una de las selecciones favoritas del público mundial.
La Selección lusa, dirigida por Fernando Santos, tampoco pudo con Austria. Cristiano falló un penal y se habló de su sequía goleadora. Las alarmas por una eliminación se escucharon. El último encuentro frente a Hungría sería de vida o muerte.
Aquí es cuando se mira por primera vez el buen fútbol de Portugal, en uno de los partidos más emotivos de la Euro. Tres veces estuvieron abajo en el mercador y al borde de la eliminación. Un doblete de CR7 ayudó para un nuevo empate y pasar a la siguiente ronda como uno de los mejores terceros.
Estamos para cosas grandes, declaró con confianza la estrella del Real Madrid, al pronosticar que la plantilla estaba de menos a más.
En octavos llegaba la Croacia de su compañero Luca Modric, una de las selecciones de mejor desempeño en la Copa y responsable de la eliminación del campeón reinante, España. Otra vez termina sin ganar en 90 minutos y sin siquiera disparar una vez a la portería rival. En la prórroga obligada (minuto 117), Quaresma rompió el empate y acercaba a los portugueses a una final soñada.
Ya entre los mejores ocho su rival sería la Polonia de Lewandowski. Otra vez los 90 minutos terminaron en empate. Incluso no hubo ganador en el alargue, pero en la ronda de penales Portugal y Cristiano Ronaldo aseguraron su presencia en semifinales. Solamente quedaban dos pasos. Podemos y queremos ganar la Copa, dijo entonces CR7, quien aseguraba querer ganar algo grande con su selección.
Para las semifinales, el duelo que se llevó todos los reflectores fue el de las dos estrellas del Real Madrid, Gareth Bale y CR7, ambos batallando por la final, con una selección de Gales que desafiaba con autoridades a las potencias europeas.
Fue el tres veces Balón de Oro quien hizo la diferencia, marcó el primero de Portugal y su noveno gol en la Eurocopa, con el que alcanzó a Michel Platini como máximo anotador de esta competición. Luego dio la asistencia a Nani para poner el dos a cero final frente a los valientes galeses. La primera victoria que consiguieron en los noventa minutos.
Doce años después de caer en la final frente a Grecia, los portugueses tendrían su revancha, esta vez frente a Francia. El encuentro inició con el pie izquierdo para la selección lusa, tras solo 25 minutos, Cristiano Ronaldo abandonó lesionado y llorando el terreno de juego, el panorama era gris. A pesar de no contar con su mayor figura, Portugal aguanto el dominio francés, los locales fueron mejores la mayor parte del encuentro, pero ninguno de los finalistas fue capaz de causar daño en 90 minutos, por lo que se necesitó de un nuevo alargue.
Y no fue sino hasta el minuto 109 que un disparo desde fuera del área de Éder, un jugador casi de relleno para Portugal, definió el partido y la Copa. Cristiano, eufórico, apelaba al coraje de sus compañeros en el campo. El resultado escribió una página importante en la historia.
No se dio el esperado duelo de los dos 7: Cristiano-Grizemann, pero se vio el pundonor de un equipo que creyó en si mismo.
Pese a no mostrar el mejor fútbol del torneo, la selección de Portugal demostró ser un equipo y demostraron que el jogo bonito no siempre es sinónimo de victoria. De esa manera, Portugal sucede a España como campeón de Europa y se abre un espacio en el lugar importante del fútbol, donde solo se admite a los campeones.
Leyenda lusitana
Definitivamente, Cristiano Ronaldo ya cuenta con un lugar en el Olimpo del fútbol. A lo largo de su carrera el lusitano no se ha cansado de romper récords, tras este campeonato, la estrella del Real Madrid se ha convertido en el jugador con más presencias en la selección nacional (133) y en una fase final de la Euro (21), también es el máximo goleador de la selección portuguesa (62) y ha conseguido alcanzar a Platini como máximo goleador de la competición (9), y muy probablemente, esta no será la última copa de naciones europeas que disputará.
Tanto con su club como con su selección, el astro sigue rompiendo marcas, en el club merengue ya es el máximo goleador histórico y ha conseguido la décima y la undécima. Mientras que en Portugal, aparte de ser el primer capitán en levantar una copa de Europa, ha sido una referencia por trece años.
Antes de Cristiano, el país luso solo había participado en dos Mundiales y dos Eurocopas. Tras el debut del 7 en 2003, Portugal ha participado en tres Mundiales y cuatro Euros, es decir, todas las competiciones grandes desde entonces.
Es por todo esto que Ronaldo ya ha superado a compatriotas como Eusébio y Luis Figo, en el puesto de máxima figura nacional, mientras que internacionalmente, probablemente el único que se encuentre un peldaño por arriba de CR7 sea Lionel Messi, quien; sin embargo, sigue frustrado porque no ha podido alcanzar ningún título mayor con la selección de Argentina. Sigue la polémica entre quién de estos dos es mejor, y cuál será su posición entre los mejores de la historia.
Cristiano, lesionado en el juego, celebró el título.