La policía mexicana detuvo el sábado a un grupo de presuntos traficantes de personas que transportaban de manera ilegal a 175 migrantes centroamericanos en varios vehículos en el estado de Veracruz, en el este de México.
«La banda (de traficantes) fue puesta a disposición de la Fiscalía General de la República, así como dos autobuses, dos camionetas Ford F150, una Kia y una camioneta de pasajeros», dijo a la AFP una fuente del ejército mexicano bajo anonimato.
Otra fuente de la Policía Federal dijo que los inmigrantes «iban con destino a Estados Unidos».
Los 175 migrantes fueron enviados al Instituto Nacional de Migración (INM) para su proceso de repatriación.
Más temprano, policías encontraron a otros 99 migrantes centroamericanos, principalmente de Honduras y El Salvador, en el vecino estado de Tabasco, que aparentemente habían sido abandonados en un camión de carga.
«Entre ellos había 41 menores de edad, quienes viajaban sin documentos oficiales que avalaran su legal estancia en territorio mexicano», dijo la Secretaría de Seguridad Pública en un comunicado.
Desde octubre pasado, los flujos migratorios que cruzan territorio mexicano para entrar ilegalmente a Estados Unidos han experimentado una escalada que ha tensado las relaciones entre Washington y México.
En junio, Estados Unidos amenazó con imponer aranceles a las exportaciones mexicanas si el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no frenaba el paso de indocumentados, principalmente guatemaltecos, hondureños y salvadoreños.
En respuesta, México desplegó a unos 21 mil soldados, 6 mil en su frontera sur -por donde acceden la gran mayoría de indocumentados- y unos 15 mil en el norte, donde comparte 3,200 km de frontera con Estados Unidos.