Washington, Estados Unidos
Una organización de Estados Unidos presentó una demanda legal para esclarecer la muerte de la migrante guatemalteca Claudia Gómez, a la que un agente de la patrulla fronteriza mató de un disparo en la cabeza hace un año, informó este sábado la oenegé.
«Estamos exigiendo justicia por el asesinato sin sentido de Claudia Gómez«, dijo en un comunicado Andre Segura, director legal de la Unión Americana de Libertades Civiles de Texas (Aclu, en inglés).
«Ha pasado más de un año y el gobierno de los Estados Unidos todavía no ha responsabilizado a la agencia o al agente que le disparó y la mató», agregó el directivo de Aclu, una de las más grandes de Estados Unidos que supervisa casos legales en las cortes para defender los derechos individuales y libertades de las personas.
Segura consideró «crucial» que el gobierno estadounidense rinda cuentas y aseguró que su asociación buscará todas las vías para asegurarse de que «se tomen medidas para obtener justicia para Claudia y evitar más pérdidas innecesarias de vidas» en el futuro.
La demanda legal contra el gobierno federal fue interpuesta en conjunto con el bufete de abogados Kirkland & Ellis LLP.
Gómez fue asesinada el 23 de mayo del 2018 por un agente de la patrulla fronteriza estadounidense. Pero, según Segura, de momento se desconoce cómo avanza la investigación de lo ocurrido o si hubo alguna sentencia en contra del oficial involucrado.
La guatemalteca de 20 años era la mayor de tres hermanos y había migrado desde el poblado indígena maya de San Juan Ostuncalco, en la provincia de Quetzaltenango, al oeste de la capital de su país, 17 días antes de morir en la zona fronteriza de Estados Unidos y México.
Según sus padres, la joven se había graduado de una carrera preuniversitaria, pero no encontró empleo por lo cual decidió migrar en busca del llamado «sueño americano».
La demanda, presentada el jueves, detalla que la guatemalteca viajaba en la calle Centeno Lane, en Río Bravo, junto con otras personas, cuando fueron enfrentadas por un guardia de la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza quien le disparó en la cabeza a pesar de que ella «no tenía armas ni nada» que pudiera representar una amenaza.
Aclu expuso que la acción presentada es un requisito previo para presentar una demanda contra el gobierno de los Estados Unidos por daños cometidos por sus agentes y empleados.
Si el reclamo no se resuelve dentro de seis meses, los padres de Claudia pueden demandar al gobierno en un tribunal federal y presentar demandas individuales contra el oficial que le disparó en la cabeza.
La noche del viernes fue repatriado el cuerpo del quinto menor migrante de Guatemala muerto bajo custodia de la patrulla fronteriza estadounidense desde diciembre pasado.