José Rubén Zamora es ingeniero de profesión y periodista de corazón. Después de 813 días retenido en una bartolina, en los que se declaró preso político, dos tribunales reconocieron que mantenerlo preso era violar sus derechos y le concedieron arresto domiciliar, mientras la justicia continúa ventilando sus retorcidos casos. Al salir de la cárcel declaró: ¡Nunca perdí mi libertad, porque mi mente y espíritu permanecieron libres!
Redacción de Crónica
Guatemala ha vivido años turbulentos para su democracia, en los que se ha hecho evidente que el sistema de justicia ha sido cooptado por fuerzas oscurantistas que temen, repudian y combaten a la prensa independiente, esa que denuncia y lucha contra la corrupción y la impunidad. Es una guerra que se ha intensificado por los últimos tres años.
En medio de esas batallas, a veces no tan silenciosas, ha emergido la figura de José Rubén Zamora Marroquín, el periodista más galardonado y reconocido en las Américas, encarcelado el 29 de julio de 2022, bajo acusaciones montadas de manera exprés por el Ministerio Publico (MP), luego de la publicación documentada de más de 140 casos de corrupción durante la administración del presidente Alejandro Giammattei, casos que nunca fueron investigados por la fiscalía.
Acusado de lavado de dinero, obstrucción a la justicia y otros delitos, fue sometido a un juicio plagado de anomalías, entre ellas, impedir que presentara pruebas de descargo y el acoso a sus abogados defensores y testigos, que terminaron siendo acusados como medida de presión.
Ese juicio fue anulado, precisamente por las acciones anómalas, pero fue maliciosamente reprogramado hasta septiembre de 2026, con el fin exclusivo de mantenerlo privado de su libertad.
La ONU, la OEA, organismos que velan por la libertad de la justicia a nivel internacional, entidades de prensa y una lluvia de países denunciaron una y otra vez las acciones irregulares del MP que, bajo el mando de la fiscal general Consuelo Porras se mostró no solo inflexible, sino además con un espíritu de revanchismo violento, pocas o nunca vistos en el MP.
Pero este año llegó una bocanada de aire fresco, cuando dos juzgados diferente reconocieron que no se estaban respetando los derechos de Zamora Marroquín y le concedieron medidas sustitutivas, por lo que pudo abandonar la cárcel mientras se siguen los procesos judiciales en su contra.
Fui un preso político por órdenes de Giammattei y de Consuelo Porras dijo en varias ocasiones el periodista. Al salir de la cárcel de Mariscal Zavala destacó con valentía: – En Guatemala, decir la verdad tiene un costo altísimo, pero callar tiene un costo aún mayor para el país.
En otra de las varias entrevistas que le hicieron la prensa nacional e internacional, dijo: ¡Prefiero morir de pie que vivir arrodillado! Ese mismo día, el fiscal de la FECI, Rafael Curruchiche empezó otra batalla por revertir la medida sustitutiva y lograr que vuelva a la cárcel. Para eso, cuenta con tres magistrados del grupo de cooptados, quienes fallaron nuevamente en su contra, sin siquiera haber escuchado la audiencia que fue impugnada. Esa batalla está ahora mismo en ebullición.
El costo por el compromiso con la búsqueda de la verdad
En el panel de expertos y analistas que opinaron que Zamora es el Personaje del Año, se tuvo en cuenta que su actitud firme e inclaudicable, sumada a sus mensajes permanentes, han mantenido en alto la moral de la prensa guatemalteca y elevado los estándares de exigencia por la transparencia y honestidad de las autoridades.
La lucha de José Rubén Zamora ha tenido un alto precio personal. Su captura y encarcelamiento no fue el único daño por decir la verdad y denunciar la corruptela. En la cárcel fue sometido a presión sicológica que le provocó daños físicos, que ahora atiende. Su diario, elPeriódico fue cercado comercialmente por el poder político y tras las acciones judiciales en marcha se vio obligado a cerrar en 2023.
Peor aún, el MP inició también persecución penal contra miembros de su familia, lo que obligó a su esposa y uno de sus hijos a salir al exilio, ante el temor de ser encarcelados sin justificación alguna.
El cierre de elPeriódico marcó un duro golpe para el periodismo en el país, dejando a cientos de trabajadores sin empleo y a los guatemaltecos sin un medio referente en la lucha contra la corrupción. – Si volviera en el tiempo, volvería a hacer el periodismo que siempre hice; perdí meses de mi vida, mi familia ha sufrido, perdí mi periódico, pero sigo creyendo en el poder de la verdad y en la esencia del periodismo.
Dejar al desnudo al MP
El caso Zamora ha sido uno de los más mediáticos en la historia del país, no solo por la cobertura de los medios locales, sino porque los grandes medios internacionales y agencias de noticias globales le han dado cobertura y seguimiento, permitiendo que queden al descubierto las acciones del MP y se evidencie que se trata de una vendetta política para hacer que pague… por todo lo que ha publicado contra las mafias, estructuras de corrupción política y el crimen organizado.
Ha llamado tanto la atención el mal proceder del MP, que la Universidad de Stanford (EEUU) y el Centro Cyrus Vance para la Justicia Internacional hicieron un estudio en el que llegaron a la conclusión de que la fiscalía, a cargo de Consuelo Porras mantiene cinco patrones con ilegalidades en los casos políticos. El cuerpo legal de Zamora confirma que los cinco se aplicaron con tenacidad y ferocidad en contra de su cliente. Estos son:
1: Acumulación de denuncias: El primero de estos patrones es la presentación de un gran número de denuncias contra una misma persona, en muchos casos “por los mismos hechos, con el claro propósito de dificultar su defensa legal. Contra Zamora hay tres causas abiertas y se investigan al menos 7 más para tener siempre argumentos y mantenerlo en prisión.
2: Denuncias anónimas o infundadas: Se utilizan como pruebas contundentes, cuando en realidad son viles montajes.
3: Imputar delitos que no corresponden: Evidenciado en los tres casos abiertos y en los que se pretende montar más adelante, de ser necesario.
4: Abuso en aplicación de medidas cautelares: Estuvo injustamente en prisión por 813 días y el MP pretende que este abuso continúe y por eso quiere que vuelva a la cárcel.
5: Irrespeto al debido proceso. Ha sido patrón en cada uno de los casos y nunca se ha respetado la presunción de su inocencia, ni se le ha permitido una defensa justa.
6: Criminalización contra abogados defensores y testigos: En paralelo, el MP ha criminalizado a abogados defensores, periodistas del diario elPeriódico y testigos, con el objeto de atemorizar, limitar el derecho de defensa e intentar ocultar la colusión entre fiscales y jueces.
El legado de Zamora
Si bien es cierto que el anómalo proceder el MP lo han sufrido en carne propia sus acosados –exoperadores de justicia, periodistas y defensores de derechos humanos, principalmente–, el caso Zamora lo ha expuesto ante la opinión pública en toda su crudeza y dimensión
Hoy se entiende mejor como los principales actores del caso, como son los fiscales Porras y Curruchiche, los jueces Fredy Orellana y Jimi Bremer, y otros de menor rango e importancia, así como el grupo parajudicial llamado Fundación Contra el Terrorismo, han actuado de manera corrupta y antidemocrática como bien lo señaló Estados Unidos y luego cerca de 40 países que emitieron sanciones internacionales contra estos y otros funcionarios.
Zamora en cambio, ha dado una cátedra de periodismo en vivo, ha mostrado que la que Gabriel García Márquez llamó la profesión más linda del mundo, es vital para la existencia de cualquier democracia.
Zamora ha confirmado lo que dice la Declaración de Chapultepec sobre libertad de prensa y democracia: Sólo mediante la libre expresión y circulación de ideas, la búsqueda y difusión de informaciones, la posibilidad de indagar y cuestionar, de exponer y reaccionar, de coincidir y discrepar, de dialogar y confrontar, de publicar y transmitir, es posible mantener una sociedad libre. Eso es parte del legado de Zamora en este 2024.
Los otros nominados
Cabe destacar que en el panel de expertos que opinaron sobre el Personaje del 2024, hubo otras menciones relevantes por sus destacados aportes en la vida política y social del país. Esos personajes son:
- Los 48 Cantones de Totonicapán, que encabezaron un movimiento de las autoridades indígenas que coadyuvó para que el golpe de estado judicial que se intentó en el país no prosperara, con ayuda de la comunidad internacional. También tuvieron presencia en momentos clave como el proceso de postulación de magistrados y su oposición al reciente y abusivo aumento salarial de los diputados
- Adriana Ruano Oliva, que se convirtió en la primera atleta guatemalteca en ganar una medalla de oro en nuestra historia en los Juegos Olímpicos. Lo hizo en la especialidad de Tiro. Guatemala participó por primera vez en las olimpíadas de 1952. Antes solamente se había obtenido una medalla de plata en 2012.