El sacerdote católico Regamy Thillainathan pensó que se trataba de un llamado de su madre cuando en medio de una videoconferencia sonó su teléfono móvil, que finalmente resultó ser un llamado del papa Francisco, según relató hoy a la radio de la Catedral de Colonia, en Alemania.
«Aquí habla el papa Francisco«, escuchó Thillainathan del otro lado de la línea el pasado viernes. En un primer momento dudó de que su interlocutor fuese realmente el sumo pontífice llamando desde Roma.
«Al principio pensé que se trataba de la broma de un amigo y pensé cuál de ellos podría ser. Pero cuando comenzó a hablar de la carta y seguí escuchando su voz supe enseguida que era él», señaló el director de la pastoral vocacional de la arquidiócesis de Colonia.
Thillainathan aprendió español durante su formación y por eso pudo hablar con el papa argentino en su lengua materna.
El sacerdote había conocido al máximo líder de la Iglesia católica la semana pasada en Roma durante un servicio en el cementerio alemán, donde le entregó una carta personal.
En su carta, Thillainathan abordó una serie de temas, entre otros, la formación de los sacerdotes en la Arquidiócesis de Colonia, pero también «prioridades personales» y esperaba a lo sumo una respuesta de un secretario del Vaticano.
Sin embargo, fue el propio Papa, que suele hacer este tipo de llamadas espontáneas, quien repasó y comentó muy seriamente cada punto de la esquela.
Por último, Francisco le pidió que saludara al cardenal de Colonia, Rainer Maria Woelki.
Thillainathan creció en Alemania, país al que huyó junto con sus padres debido a la guerra civil en Sri Lanka.