Según el juez Miguel Ángel Gálvez, del Juzgado B de Mayor Riesgo, hubo suficientes indicios para presumir la participación del exgobernante en la estructura criminal denominada «La Línea».
Tras una larga audiencia donde repasó los extremos señalados por el Ministerio Público (MP) y los argumentos de la defensa del expresidente, además de interpretar los indicios ofrecidos por el ente investigador (especialmente la llamada telefónica entre Pérez y el exsuperintendente Carlos Muñoz pidiendo cambios en RRHH y la documentación de las reuniones entre Salvador Gonzáles «Eco» y otros integrantes de la estructura) y explicar a partir de estos cómo la estructura negociaba con los importadores a cambio del pago de sobornos, el togado resolvió dictar el auto de procesamiento en contra del exmandatario guatemalteco por los delitos de Asociación Ilícita, Caso Especial de Defraudación Aduanera y Cohecho Pasivo.
«En este momento hay indicios racionales suficientes que hacen presumir razonadamente la implicación del sindicado en los hechos señalados por el Ministerio Público en esta audiencia. En ningun momento lo estoy calificando de responsable o no, solo estoy abriendo el proceso para que a través de los medios de investigación se pruebe o se descarte la responsabilidad penal del acusado en los actos aquí discutidos», añadió Gálvez al término de la lectura del fallo.
Dentro de sus planteamientos el juzgador también se refirió a las 28 personas ligadas a proceso, entre ellas la exvicepresidenta Roxana Baldetti, y 14 pendientes de aprehensión (Juan Carlos Monzón, etc.) por el caso «La Línea», a la vez que aclaró que estas menciones no pueden calificarse posteriormente como opinión anticipada sobre el proceso y sus implicados. «El MP está investigando una estructura criminal en la que no se pueden separar sus piezas, y se debe comprender en todos sus aspectos», precisó al respecto.
Con la resolución, dictada 4 horas después de iniciada la audiencia, el Ministerio Público tiene tres meses para ampliar las líneas de investigación entorno al caso y la probable participación de Pérez en los delitos precisados.
A prisión
Asi, luego de un receso de 45 minutos y de haberse extendido la segunda parte de la audiencia por más de una hora, el organo jurisdiccional consideró que «lo prudente es dictar el auto de prisión preventiva en contra del señor Otto Pérez Molina por el peligro de obstaculización a la averiguación de la verdad» que representaría la libertad del expresidente. Pérez Molina continuará aprehendido en Matamoros.
«Por el cargo que ocupó el señalado, él tendría la posibilidad de impedir la adecuada investigación de los hechos señalados», concluyó Gálvez.