- En medio de una crisis entre el sistema de justicia del país y el gobierno del presidente Bernardo Arévalo, se logra elección de presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), sin que ofrezca un cambio a la vista.
El nuevo presidente de la Corte Suprema de Justicia de Guatemala es Teódulo Ildefonso Cifuentes Maldonado, quien fue electo tras la presión ejercida por la Corte de Constitucionalidad (CC) para que se realizara la elección en un plazo de cinco días y su gestión principia en medio de incertidumbre.
Cifuentes Maldonado, abogado y notario con experiencia en el ejercicio liberal de la profesión y como magistrado en salas de apelaciones, ha sido señalado por sus vínculos con Allan Rodríguez, diputado y operador político del partido Vamos. Este partido es identificado por algunos sectores como parte de un bloque que busca mantener prácticas antidemocráticas dentro del sistema judicial del país, así como el marco de impunidad que ha protegido a exfuncionarios del gobierno del presidente Alejandro Giuammattei.
La elección de Cifuentes Maldonado ha generado más sombras que luces, pues su ascenso ocurre en un contexto de crisis nacional y luego de un oscuro proceso de postulación y elección de magistrados, donde la influencia de actores externos fue un tema recurrente.
En opinión de los grupos pro justicia en el país la integración de las cortes del Organismo Juidicial (OJ) y la elección de Cifuentes demuestran que hay importantes operadores antidemocráticos que mantienen influencia sobre magistrados, jueces y el propio MP, lo que hace temer que continuará imperando la impunidad y el acoso judicial contra quienes han denunciado o denuncian la corrupción.
El mandato de la CC, obligando a la elección del presidente en un plazo de cinco días, fue interpretado por varios sectores como una presión inusual para garantizar la pronta elección del presidente de la CSJ. Esta decisión ocurre en un contexto político complejo, marcado por un cuestionado proceso de selección de magistrados y señalamientos de cooptación del sistema de justicia por fuerzas vinculadas al partido oficialista Vamos y otros sectores considerados antidemocráticos.
De acuerdo a grupos con informes del interior del sistema de justicia, Cifuentes pertenece a un grupo cinco magistrados allegados al jefe de la Bancada Vamos, Allan Rodríguez, e integrado por magistrados Igmaín Galicia, Carlos Contreras, Luis Corado y Claudia Paredes, quienes a último momento recibieron votos del llamado «grupo de los ocho», con alta influencia de los allegados al presidente de la CC Nester Vásquez, quien habría aporrtado los votos de los magistrados Clemen Juárez, Jenny Alvarado y Gustavo Morales.
𝗠𝗔𝗚𝗜𝗦𝗧𝗥𝗔𝗗𝗢𝗦 𝗘𝗟𝗜𝗚𝗘𝗡 𝗣𝗥𝗘𝗦𝗜𝗗𝗘𝗡𝗧𝗘 𝗗𝗘 𝗖𝗦𝗝
— Guatemala Visible (@guatevisible) November 17, 2024
Teodulo Ildefonso Cifuentes Maldonado es electo presidente de la Corte Suprema de Justicia, período 2024-2025.
Votación final:
✅12 votos a favor
❌1 voto en contra
❗Se requería de 9 votos como mínimo… pic.twitter.com/fV2dzlh4mS
Según analistas legales, la urgencia con la que se llevó a cabo el proceso refleja la influencia de grupos de poder que buscan mantener el control de la CSJ, una institución clave en un momento de alta conflictividad política y social en Guatemala.
La CSJ en el ojo del huracán
La elección de Cifuentes ocurre en un momento crítico para la CSJ, que ha sido cuestionada por su falta de independencia ,m lo mismo que el MP y la CC. En sus primeras declaraciones, Cifuentes prometió actuar con «transparencia y apego a la ley», aunque sus palabras no logran disipar las dudas sobre su capacidad para liderar una institución debilitada por la desconfianza ciudadana, como bien lo han señalado organismos internacionales, principalmente la ONU y la OEA, entre otros.
Diversos sectores han reaccionado con escepticismo ante la elección. Mientras que representantes del partido Vamos y aliados celebraron la designación como un paso hacia la «estabilidad judicial», líderes de oposición, activistas y expertos legales advirtieron que la elección de Cifuentes podría profundizar la crisis institucional en Guatemala.
“Esta elección no fue transparente ni democrática. Es evidente que se buscó imponer a un presidente que garantice decisiones favorables a los intereses del partido oficialista y sus aliados”, comentó un analista político que prefirió mantener el anonimato.
El futuro de la CSJ bajo Cifuentes
Con Cifuentes al frente de la Corte Suprema de Justicia, el sistema judicial guatemalteco enfrenta un reto significativo para recuperar la confianza de la ciudadanía. Los próximos meses serán clave para determinar si el nuevo presidente actuará como garante de la justicia o si, por el contrario, profundizará la percepción de que el sistema judicial está al servicio de intereses políticos.
En un país donde la justicia se ha convertido en un campo de batalla político, la elección de Cifuentes podría marcar un punto de inflexión, ya sea hacia una mayor consolidación de la cooptación institucional o hacia un renovado esfuerzo por preservar el Estado de derecho.