El Reino Unido lamentó el viernes que «se haya avanzado muy poco» en las negociaciones con la Unión Europea sobre su relación comercial posbrexit, al término de otra semana de videoconversaciones, y pidió a Bruselas un «cambio de enfoque» para alcanzar un acuerdo.
«Lamento que se haya avanzado muy poco hacia un acuerdo sobre las cuestiones más importantes», afirmó el negociador británico David Frost en un comunicado, aunque insistió en que cree «posible» alcanzar un resultado antes del fin del período de transición el 31 de diciembre.
Tras un año de aplazamientos y caos político, el Reino Unido salió oficialmente de la Unión Europea a finales de enero gracias a la aplastante mayoría obtenida por el primer ministro Boris Johnson en las legislativas de diciembre.
El país entró entonces en un periodo de transición que termina a finales de año pero puede ser ampliado por petición de Londres hasta dos años más.
Durante este periodo nada cambia realmente, para permitir a empresas y administraciones adaptarse a la nueva situación. Y sobre todo, para que Londres y Bruselas negocien su futura relación en materia de comercio y seguridad.
Obstaculizadas por la pandemia de coronavirus, que obligó a realizarlas por videoconferencia, las negociaciones están bloqueadas en varias cuestiones importantes.
Aún así, Londres sigue determinado a no pedir una prolongación, con la esperanza de presionar a la UE para alcanzar un rápido acuerdo en lo que queda de año.