Salvador, Brasil
Los disparos de la artillería de Brasil golpean los muros del resistente fortín de Venezuela. La Canarinha necesita de un ariete que los sepa derrumbar: en Copa América, la verdeamarela empieza a extrañar a un talento como el de Neymar.
Decía el general chino Sun Tsu que la defensa es para tiempos de escasez y el ataque para tiempos de abundancia. El DT Rafael Dudamel lo sabe bien, puso a la Vinotinto a resistir desde sus murallas y contuvo con éxito el ataque del anfitrión.
Los hombres de Tite presionaron desde el primer minuto. Las jugadas colectivas hacían trabajar a los petroleros. En su estreno en el torneo continental, Arthur controló el mediocampo junto con un sólido Casemiro.
Habilitaciones para Coutinho, para Firmino, Neres y jugadas personales de Richarlison. Pero todos los intentos se quedaban en eso.
Brasil tuvo poca capacidad de infiltración, poco poder de creación y escasas chances de gol. Muchos actores pero ningún protagonista que rompa las vallas rivales. Ninguno pareció tener la cintura suficiente para quebrar la defensa.
Con este resultado, Venezuela le rompió una racha a Brasil de 20 partidos consecutivos marcando gol. La última vez que no anotó la Canarinha fue en un amistoso ante Inglaterra el 14 de noviembre de 2017.
Se busca gambeteador
«Neymar es un jugador con un desequilibrio individual único, obviamente hace falta, pero eso no significa que Brasil no esté a la altura de ganar la Copa América», consideró Diego Lugano, exestrella de Uruguay y hoy comentarista deportivo.
La Vinotinto llegó a su segundo duelo del Grupo A de la Copa América con su valla invicta. Lidera el inquebrantable fortín el portero Wuilker Fariñez, hombre del Millonarios de Colombia y que podría ser fichado por el Barcelona de España.
Ya había dado muestras de su invulnerabilidad al aguantar los remates de Perú en su debut en la Copa América.
Pero quienes tuvieron más trabajo fueron los internacionales Ronald Hernández (Stabæk Fotball/NOR), Mikel Villanueva (Gimnastic de Tarragona/ESP), Yordan Osorio (Vitoria de Guimaraes/POR) y Roberto Rosales (Espanyol/ESP).
Villanueva y Osorio se jugaron la integridad para contener los ataques combinados de Neres y Firmino, y los desbordes de Dani Alves y de Richarlison.
En el mediocampo, el hombre del Cádiz español Darwin Machís puso el equilibrio entre la zaga e incluso participó en el ataque, en complicidad con Salomón Rondón y Tomás Rincón.
No se olviden de Everton
En el segundo tiempo, Tite intentó ponerle velocidad y efectividad al juego. Sacó a Richarlison y puso a Gabriel Jesús para ir por dentro junto con Firmino. Si bien se notó mayor agilidad, era más de lo mismo.
El atacante del Manchester City consiguió marcar a los 60 minutos pero el VAR le anuló la gracia.
En las radios, las tribunas y las narraciones deportivas el pedido era unánime: alinear a Everton, autor del tercer gol de Brasil ante Bolivia en el debut.
El comandante de la Canarinha soltó las riendas al hombre del Gremio que empezó por fin a alterar la defensa rival. A los 86, centró desde la izquierda para Coutinho, que logra marcar pero en fuera de juego. Otra vez el VAR hace justicia.
«Encontramos un equipo muy cerrado defensivamente, en el segundo tiempo estuvieron mayor tiempo en su área», dijo el zaguero Thiago Silva, al término del encuentro disputado en Salvador.
«Venezuela estuvo cerrada, en el segundo tiempo conseguimos finalizar un poco más. Creo que tenemos que concentrarnos y nos queda otro juego difícil contra Perú», señaló el ariete del Gremio.
Brasil enfrenta a Perú en el último duelo de la primera fase por el Grupo A el sábado en el Arena Corinthians de Sao Paulo.
En ese grupo, ambos están empatados con cuatro puntos, seguidos por Venezuela con 2 y Bolivia sin puntos.