El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, advirtió este lunes que desplegarán controles sanitarios en la frontera con Honduras para evitar el ingreso de personas contagiadas de coronavirus ante la llegada de una nueva caravana de migrantes que comenzaría a llegar desde el martes con rumbo a Estados Unidos.
Giammattei dijo a periodistas que los migrantes que integren la caravana -éxodo que se ha anunciado por redes sociales- , serán detenidos en la frontera para ser «basculeados», término popular guatemalteco para referirse a una revisión minuciosa.
«Hay una nueva caravana. Vamos a detenerla en la frontera y todo el mundo va ser ‘basculeado’. A todo el mundo le vamos a tomar su temperatura y la persona que venga con un síntoma (de coronavirus) no la vamos a dejar entrar, inmediatamente la vamos a expulsar», señaló el gobernante.
Hasta el momento, Guatemala no ha registrado casos confirmados o sospechosos del COVID-19, y de los países centroamericanos solo Costa Rica reporta personas infectadas del virus.
Giammattei señaló que la expulsión de extranjeros con indicios de la enfermedad está amparada en un estado de calamidad decretado por el gobierno la semana pasada, que busca prevenir el ingreso del virus y también minimizar su expansión.
Desde el último trimestre de 2018, la migración ilegal de hondureños, salvadoreños y guatemaltecos ha tenido un incremento con la salida de caravanas de migrantes que huyen de la pobreza y la violencia.
La última caravana que salió desde Honduras en enero pasado, y que llegó a tener unos 5,000 migrantes, fue frenada por México, que desplegó a miles de agentes en su frontera con Guatemala para contener a los migrantes.
Los éxodos masivos de migrantes han generado la molestia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien presionó a los países del norte centroamericano para firmar acuerdos de asilo que permitan intentar contener la migración irregular.