Demostrando una gran fuerza colectiva, el Barcelona ha conquistado este sábado su 26º título de Liga gracias al talento de Leo Messi, la experiencia de Luis Suárez y Gerard Piqué, además de la irrupción de Clément Lenglet. ¡Un bonito trabajo de equipo firmado por Ernesto Valverde!
Messi, el glotón
El hombre del título es evidentemente Leo Messi: capitán, mejor goleador de la Liga (34 goles) y mejor pasador (13 asistencias), el argentino se desvivió para lograr su décimo título liguero y 34º trofeo de su carrera con el Barça, récord del club.
Messi multiplicó sus exitosos saques de falta (6 en total) por la escuadra o por debajo de la barrera, y sigue siendo el referente del juego barcelonista especialmente tras la salida de Andrés Iniesta en verano, su predecesor en la capitanía.
«Messi nos saca siempre de muchos problemas, está claro», dijo Valverde, añadiendo que «no vamos a pedir perdón por tener a Messi, es una suerte que esté con nosotros».
En resumen, a sus 31 años, ‘la Pulga’ sigue insaciable. El mejor goleador de la historia de la Liga está cerca de acabar ‘pichichi’ por sexta temporada en su carrera, lo que le permitiría igualar con el mítico delantero Telmo Zarra, seis veces mejor goleador del campeonato español entre 1945 y 1953.
Y acaricia también una sexta Bota de Oro como mejor goleador de las ligas europeas… ¿a la espera de un eventual sexto Balón de Oro?
Suárez, el dolor de cabeza
Vecino y mejor amigo de Messi en las afueras de Barcelona, el uruguayo Luis Suárez, de 32 años, es también su mejor cómplice sobre el césped.
Fue el que dio un paso adelante cuando el argentino se lesionó en un brazo en otoño, marcando principalmente un triplete frente en el Clásico contra el Real Madrid en el Camp Nou (5-1). Y con 21 goles, ocupa el segundo puesto de la clasificación de artilleros por detrás de Messi.
«Es un dolor de cabeza permanente para el rival, no sabes cuándo puede aparecer. Su perseverancia hace de él un seguro», resumió Valverde.
Piqué, el jefe
Si la defensa barcelonista se beneficia de las grandes paradas de su portero Marc-André ter Stegen, la excelente temporada de Gerard Piqué explica también la solidez del equipo azulgrana.
El defensa catalán, de 32 años, convertido en empresario de éxito y liberado de la selección española desde su retirada internacional, ha mostrado un nivel muy alto y ha encadenado los partidos sin fallo.
«Creo que en líneas generales defensivamente estamos en el mejor momento de la temporada. A nivel personal me siento muy cómodo, muy bien», dijo Piqué, que sueña con un nuevo triplete Liga-Copa-‘Champions’, como en 2009 y 2015.
Lenglet, la revelación
El centrocampista brasileño Arthur, habilidoso y sereno, podría haber sido la revelación barcelonista ‘oficial’ de la temporada, pero finalmente ha sido el francés Clément Lenglet (23 años) el que destacó en el eje de la defensa barcelonista.
Llegado del Sevilla, Lenglet se metió rápido en harina debido a las lesiones crónicas de su compatriota Samuel Umtiti. Su solidez, su lectura del juego y su forma de iniciar el juego han impresionado a los observadores.
El interesado, que espera pacientemente una eventual convocatoria con sus selección, vive humildemente su ascenso: «Todos los días me entreno con los mejores del mundo», dijo a la AFP.
Valverde, la ponderación
Dos temporada en Barcelona y ya dos títulos de campeón para Ernesto Valverde, que ha impuesto su carácter prudente y sólido al equipo azulgrana.
El tranquilo técnico vasco gestionó su efectivo con maestría, evitando cansar a sus figuras en la Liga para que brillen en Europa, al contrario que la temporada pasada.
Ahora está a un paso del triplete con el que se uniría a Pep Guardiola (2009) y Luis Enrique (2015) en el grupo de los grandes técnicos barcelonistas. Ocurra lo que ocurra, su gran gestión la ha valido ya una renovación hasta 2020, con otra temporada opcional.