Más de 510,000 muertes se han registrado en los últimos 50 años por desastres naturales vinculados al cambio climático en América Latina, una región extremadamente vulnerable a estos fenómenos, afirmó este jueves la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
Entre 1979 y 2019 hubo 2,309 desastres naturales en esa región, que causaron 510,204 muertes y afectaron a un total de 297 millones de personas, además de provocar daños por 437,000 millones de dólares, indicó la Cepal.
Los datos fueron incluidos en el libro «La emergencia del cambio climático en América Latina y el Caribe: ¿seguimos esperando la catástrofe o pasamos a la acción?», presentado este jueves en una videoconferencia desde su sede en Santiago.
En un mensaje enviado para el lanzamiento, Antonio Guterres, secretario general de la ONU -de la que es parte la Cepal-, destacó el aporte de la publicación para el diseño de políticas públicas «como para el conjunto de nuestras sociedades, protagonistas indispensables de un cambio en los patrones de producción y consumo que ya no puede seguir esperando».
La publicación describe a América Latina y el Caribe como «una región extremadamente vulnerable al cambio climático, a causa de su dependencia de actividades muy sensibles al clima, su poca capacidad adaptativa y su exposición a diversos fenómenos hidrometeorológicos extremos».
La crisis climática y también la actual emergencia sanitaria por el coronavirus, que avanza en América Latina con más de 87.000 muertos y 1,8 millones de casos, son parte de un modelo de desarrollo «insostenible y desigual», con el predominio de las élites y la cultura del privilegio que han propiciado efectos negativos para la región, agrega el documento de Cepal.
Este modelo, añade, se ha basado «en grandes externalidades negativas como las emisiones asociadas al cambio climático, que rebasa umbrales ambientales globales y con vulnerabilidades sistémicas que han sido evidenciadas por el COVID-19».
«El horizonte es la igualdad, el cambio estructural progresivo es el camino y la política, el instrumento», dijo, en tanto, Alicia Bárcena, secretaria general de Cepal.
Bárcena alentó el avance hacia a un cambio del modelo con políticas para sectores estratégicos que reducen emisiones, crean empleo y potencian inversiones, y permiten enfrentar la reactivación con equidad y sostenibilidad para avanzar hacia un nuevo desarrollo.