Un total de 464 menores de edad que emigraron a Estados Unidos sin la compañía de sus padres o algún familiar han retornado a Guatemala durante la crisis sanitaria que afronta el país por la pandemia COVID-19. De acuerdo con la Procuraduría General de la Nación (PGN), en marzo y primeros días de abril han arribado 84 niñas y 281 niños.
Hasta el momento, los infantes no han guardado cuarentena en un lugar específico. La PGN afirmó que al momento de que lleguen al país deben pasar por los controles sanitarios del Ministerio de Salud para descartar cualquier síntoma. Solo los niños que no presenten algún padecimiento y que no sean ubicados a los familiares de forma inmediata, serán trasladados a los albergues Nuestras Raíces, quienes son administrados por la Secretaria de Bienestar Social (SBS).
Francisco Molina, titular de la SBS, aseguró a medios de comunicación que debido a la emergencia sanitaria los menores deberán permanecer hasta 96 horas en el albergue mientras se encuentra a un familiar.
Agregó que desde el 13 de marzo han atendido a 207 menores migrantes y que todos han sido reubicados con sus familiares, concluyó.
El 30 de marzo, dos menores fueron enviados al Hospital de Villa Nueva porque presentaban fiebre alta, pero las pruebas de COVID-19 dieron negativo.