El Manchester City se metió en los cuartos de final de la Liga de Campeones, este viernes al ganar 2-1 al Real Madrid en la vuelta de octavos de la competición continental.
El equipo inglés se adelantó con un tanto de Raheem Sterling (9), Karim Benzema puso de cabeza el 1-1 (28), pero Gabriel Jesús firmó el 2-1 (68), que certificó el pase del City a la siguiente fase.
Vencedor 2-1 en la ida en Madrid en febrero, antes del parón del fútbol por el coronavirus, el City se impuso 4-2 en el global de la eliminatoria, para continuar su camino a cuartos, donde le espera el Olympique de Lyon, el viernes de la próxima semana en Lisboa.
Empezó sufriendo el Real Madrid ante la presión del equipo inglés que se adelantó pronto tras un error de Raphael Varane, que también volvería a ser el protagonista negativo en el segundo tanto del City.
Gabriel Jesus robó el balón en área al francés para pasar al centro donde Sterling sólo tuvo que empujar el balón a la red madridista (9).
Respondió Benzema con un disparo a la media vuelta en el balcón del área que sacó el portero Ederson (21), antes de igualar pocos minutos después.
Una internada de Rodrygo por la derecha, acabó con un centro al área donde apareció el francés para picar el balón de cabeza y hacer el 1-1 (21).
El gol tranquilizó los ánimos del Real Madrid, al que otro tanto permitía igualar la eliminatoria.
El equipo blanco empezó a jugar con más orden en defensa, mientras al City trataba de volver a presionar alto en busca de un error que le permitiera arrancar cerca del área de Courtois.
Tras el descanso, el Real Madrid mostró otra cara, poniendo más intensidad en su juego y tratando de controlar el centro del campo, pero cuando mejor estaba el equipo blanco, llegó el segundo tanto local.
Gabriel Jesús interceptó una mala cesión de Varane para marcar el segundo de disparo cruzado ante la salida de Courtois (68).
El gol cayó como un jarro de agua fría en las filas madridistas, que con el tiempo en contra trató de irse adelante en busca de un tanto que volviera a meterle en el partido, aunque el marcador ya no se movería.