El técnico azulgrana abre una nueva vía al margen de la delantera
Más madera. Luis Enrique no cede basta. Con el club ultimando la llegada del cuarto delantero para acompañar a Messi, Neymar y Suárez en el ataque azulgrana, el técnico del Barça abre una nueva vía en los despachos.
‘Lucho’ no termina de ver clara la útlima línea. Con la delantera a punto de quedar cerrada y el medio campo reforzado hasta los extremos y siendo una de las líneas más sólidas y con más alternativas de Europa, las dudas de asturiano son dobles.
El central sigue teniendo a Luis Enrique sin dormir. Las salidas de Bartra/Vermaelen y la lesión de Mathieu – en el club preocupa, y mucho, las continuas dolencias musculares del francés- deja al equipo con únicamente tres jugadores solventes para el puesto –Piqué, Mascherano y Umtiti- en una temporada que se advierte larga. Lucho vería con buenos ojos un último esfuerzo para apuntalar el puesto: Lemos (Las Palmas) o Marlon (propiedad del Fluminese, pero cedido al Barça B hasta 2017) son los elegidos.
El otro punto de desaprobación se encuentra en el lateral derecho. La confianza de Luis Enrique en Aleix Vidal es nula. El asturiano ha pedido al Barcelona la salida de Vidal para atacar a un futbolista de garantías que haga pareja con Sergi Roberto. La operación, eso sí, sólo se atacará si el club es capaz de colocar a un Aleix del que el mercado no quiere saber nada por las cifras que el Barça pagó hace únicamente un año al Sevilla.