Antes que sea demasiado tarde, los republicanos harán lo que esté en su poder para detener al magnate Donald Trump, que parece encaminar su candidatura rumbo a las elecciones de Noviembre frente a los demócratas, sin embargo sus rivales no darán tregua y unen sus fuerzas a falta de un día para el «Supermartes» definitorio de la nominación por parte de 12 Estados.
La estrategia no es precisamente inclinarse por una candidatura, pero sí para que pierda fuerzas, consiste en criticar el carácter de Trump, su falta de de claridad política mientras al millonario no le tiemblan las manos para seguir fiel a su política antimigrante.
De hecho protagonizó otra escena hoy Lunes, ya que mandó a sacar a manifestantes promigrantes, y les dijo: ¿Eres de México?¿No es divertido estar en un mitin de Trump? Créanlo o no, vamos a unificar este país» y cuando iba a concluir su frase fue interrumpido. ¿Hay otro por allá? Sáquenlo también.
No hay duda de que si Donald arrasa en el Supermartes y gana en otras partes con grandes márgenes, posiblemente se vuelva imparable, dijo Cruz el domingo en CBS en tono preocupado y consciente que si su rival logra ganar mañana, se volverá imparable.
Uno de las críticas más fuertes con tra Trump es no rechazar el apoyo del líder del Klu Klux Klan, David Duke y al cuestionarle sobre dicho apoyo él solo se limitó a decir que no sabía nada de David Duke. Sin embargo hoy en «Today» de NBC dijo que «no entendió bien» partes de la entrevista y que «repudió el apoyo todo el fin de semana en Facebook y Twitter».
El líder del Klu Klux Klan dijo a sus simpatizantes en un programa de radio que votar contra Trump era equivalente a «traicionar su herencia».
Rubio aprovechó el momento y en un mitin en Virginia dijo que «no podemos ser un partido que se niega a condenar a supremacistas blancos y el Ku Klux Klan«.
Mientras llega el «Supermartes», las cosas en el bando republicano se intensifican cada vez más y se determinará si se Trump afianza o estanca su poderío.